La Diada del cambio climático

Convendría ser conscientes de los debates que no estamos teniendo y que son de gran importancia

Una mujer protege el interior de un vehículo dañado por el granizo caído en La Bisbal de l'Empordà.David Borrat (EFE)

Alguno de los fenómenos meteorológicos vividos en Cataluña a finales de agosto y principios de septiembre, como las intensas granizadas, que incluso han causado una muerte, son propias de un clima tropical y necesitan más conocimiento para poder responder a lo que está sucediendo.

“El cambio climático mata”. El verano empezó con el presidente del Gobierno español Pedro Sánchez haciendo esta declaración en respuesta a los graves inc...

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Alguno de los fenómenos meteorológicos vividos en Cataluña a finales de agosto y principios de septiembre, como las intensas granizadas, que incluso han causado una muerte, son propias de un clima tropical y necesitan más conocimiento para poder responder a lo que está sucediendo.

“El cambio climático mata”. El verano empezó con el presidente del Gobierno español Pedro Sánchez haciendo esta declaración en respuesta a los graves incendios que se estaban viviendo, con pérdida de vidas incluida. Es un hecho histórico. Por primera vez se establecen públicamente y con todos los altavoces posibles los efectos de una realidad que aún no parece estar asumida. El verano que está acabando quedará marcado para muchas personas como uno de los más calurosos que se han vivido y evidencia palpable de las consecuencias de la emergencia climática que estamos viviendo.

Se afirmó también, y se hizo viral, que este verano, que tan cálido nos está pareciendo, sería el más fresco de los que vendrán. Un juego de palabras para llamar nuestra atención sobre la gravedad de la situación en la que nos encontramos. No podemos saber si será así, pero si sabemos que el clima está cambiando. No sabemos si este verano será el más fresco de los que vendrán, pero hay evidencias suficientes para afirmar que estamos viviendo un aumento de las temperaturas, de fenómenos meteorológicos extremos, de incendios de mayor intensidad… Un conjunto de fenómenos alarmante y con graves consecuencias. Sí sabemos que no estamos haciendo lo necesario para mitigar, frenar y revertir el cambio climático. Por ejemplo, no estamos frenando las emisiones que provocan el calentamiento climático.

La Diada del Onze de Setembre del año pasado estuvo marcada por el debate sobre la ampliación del aeropuerto del Prat. En el debate nacional se colaba un debate socioambiental. Un debate que supuso ciertas modificaciones en la política de trincheras de los últimos años. En la Diada de esta edición las trincheras del debate nacional también están en recomposición, se agudiza el enfrentamiento entre sectores independentistas. Podríamos escribir un artículo con la metáfora del cambio climático aplicada al clima entre sectores independentistas… Pero todo merece su atención. Convendría ser conscientes de los debates que no estamos teniendo y que son de gran importancia y urgencia.

El Ayuntamiento de Barcelona al inicio del verano anunciaba la constitución de la Asamblea Ciudadana por el Clima, un proceso deliberativo que incorporará a un centenar de personas elegidas por sorteo para debatir la situación de emergencia climática en la ciudad y concretar acciones y soluciones. ¿Qué importancia le vamos a dar a esta iniciativa y a otras en esta dirección? Empieza el nuevo curso político, está por ver si conseguimos que los debates y las soluciones urgentes que necesitamos en diferentes ámbitos se pueden concretar. Hace demasiados años que estamos pasando de curso sin aprobarlo.

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