Copas tapadas y un nombre en clave: el protocolo para prevenir agresiones en las discotecas catalanas
Una veintena de locales de ocio nocturno lucharán contra la sumisión química cubriendo los vasos
Una veintena de discotecas catalanas servirán, a partir de junio, las copas con una tapa de plástico para impedir que se puedan introducir drogas y sustancias que lleven a la sumisión química de la persona que se las está bebiendo. Con ello se busca evitar episodios de agresión sexual y robos. Además, estos negocios han activado el protocolo denominado ...
Una veintena de discotecas catalanas servirán, a partir de junio, las copas con una tapa de plástico para impedir que se puedan introducir drogas y sustancias que lleven a la sumisión química de la persona que se las está bebiendo. Con ello se busca evitar episodios de agresión sexual y robos. Además, estos negocios han activado el protocolo denominado Ask for Angela (pregunta por Ángela), mediante el cual, a aquel cliente que considere que está en peligro le bastará con acercarse a un empleado y preguntar por Ángela. Automáticamente, el trabajador activará todas las alarmas y llamará a seguridad para socorrer a la víctima.
El secretario general de la Federación Catalana de Asociación de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm), Joaquim Boadas de Quintana, ha explicado a EL PAÍS que esta iniciativa forma parte de un conjunto de medidas que están adoptando las discotecas para obtener el sello International Nightlife Safety Checked [el sello pertenece a una asociación que se encuentra en la misma dirección que la sede de Fecasarm] y que obliga a aquellos que quieran obtenerlo a realizar mejoras en la seguridad de sus locales. “Hay varias medidas protectoras que pasan por la formación de todos los empleados, desde el DJ [pinchadiscos] hasta la persona del guardarropa, para detectar si algún cliente se encuentra en peligro”. También se colocan desfibriladores y se imparte formación para saber usarlos. Además, se impulsa una novedosa medida para que no se puedan adulterar las consumiciones. “Vamos a ser la primera organización en implementar estas tapas de vasos, para que nuestras clientas estén seguras”, ha destacado Boadas.
El secretario de Fecasarm destaca que existen dos formatos de tapas: las hay de un solo uso y existen otras que los propios clientes podrán adquirir, por un valor que ronda los seis euros, y utilizar fuera de las discotecas. Para Boadas es muy importante la cartelería de los locales. “Remarcaremos el protocolo Ask for Angela y hemos formado a todos nuestros empleados para que actúen con rapidez y garanticen la seguridad de nuestros clientes. Además, para los padres de nuestros clientes es un gran activo, ya que todas las discotecas con el sello están en la web de International Nightlife Safety Checked y eso garantiza a los progenitores que sus hijos van a un lugar seguro”, advierte Boadas.
David López pertenece a la asociación Front Marítim que aglutina varias de las discotecas de la zona litoral barcelonesa. “Opium, Pachá, Shoko y Carpe Diem dispondrán en breve de estas tapas justo cuando esperamos más turismo y más clientela. Es un dispositivo adhesivo que se adapta a las bocas de los vasos. Nosotros asumiremos el coste porque nos interesa la seguridad de nuestras clientas”, advierte López.
Las tapas de un solo uso las adquieren en bobinas, mientras que la lavable es similar a una goma de pelo y puede incorporarse el logo de la empresa.
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