La presión en las UCI limita la actividad quirúrgica no urgente en Cataluña
Los hospitales Arnau de Vilanova, en Lleida, y doctor Trueta, en Girona reprograman sus operaciones por el auge de la covid
La actividad quirúrgica no urgente está en peligro por el aumento de pacientes críticos con coronavirus en los hospitales catalanes. El hospital Arnau de Vilanova de Lleida lleva días reprogramando las cirugías menos urgentes y el Trueta de Girona empezó ayer. La mayoría de centros admiten que la presión asistencial pone en riesgo su agenda de operaciones. El auge de la cuarta ola, sin embargo, muestra cierta irregularidad en su crecimiento, y parte del sector sanitario reconoce que preveía un aumento aún mayor de ...
La actividad quirúrgica no urgente está en peligro por el aumento de pacientes críticos con coronavirus en los hospitales catalanes. El hospital Arnau de Vilanova de Lleida lleva días reprogramando las cirugías menos urgentes y el Trueta de Girona empezó ayer. La mayoría de centros admiten que la presión asistencial pone en riesgo su agenda de operaciones. El auge de la cuarta ola, sin embargo, muestra cierta irregularidad en su crecimiento, y parte del sector sanitario reconoce que preveía un aumento aún mayor de los positivos tras la Semana Santa. Los sanitarios admiten que las próximas dos semanas serán complejas.
“Hemos tenido que reprogramar cirugías no urgentes desde Semana Santa”, explica Jesús Caballero, jefe de medicina intensiva en el hospital Arnau de Vilanova de Lleida. La provincia sufre actualmente la quinta ola por el repunte sufrido el pasado verano, a diferencia del resto del territorio, y el centro repite patrones de organización. El hospital ha ganado camas — “hemos triplicado el espacio de las UCI durante la pandemia”, asegura— y las actividades quirúrgicas se limitan para garantizar la capacidad logística. “En Lleida ya vimos el aumento antes de Semana Santa. Los datos siguen siendo negativos y los ingresos crecen en todos lados”, resume Caballero, presidente de la Societat Catalana de Medicina Intensiva (SOCMIC), de la Acadèmia de Ciències Mèdiques de Catalunya.
En Girona, el hospital doctor Trueta suspendió este lunes por la tarde la mitad de sus operaciones y canceló todas las operaciones de tarde hasta el jueves “debido al progresivo aumento de los pacientes covid y a la situación epidemiológica”, según anunció en su cuenta de Twitter.
Cataluña registró ayer 515 pacientes en cuidados intensivos y mantiene la subida constante de las últimas dos semanas, en las que los hospitales han asumido más de 100 críticos más. El crecimiento de los últimos días añade tensión a unos centros que en los últimos tres meses apenas han descendido de los 400 críticos, una cifra que el departamento de Salud entiende de riesgo para la normalidad de la actividad hospitalaria.
”Ya esperábamos un repunte”, admite Xavier Castells, jefe del servicio de Epidemiología del Hospital del Mar de Barcelona. “El problema es que no llegamos a bajar en las UCI. Ahora partimos de una situación más alta que antes de la segunda y la tercera ola”, lamenta, “y estamos en cifras que nos pone en situaciones críticas en relación a la actividad quirúrgica”.
Algunos de los responsables sanitarios consultados admiten que no es sencillo prever hasta dónde llegará esta cuarta ola, pero aseguran que temían un aumento de los positivos mayor tras la Semana Santa. La positividad es actualmente del 7,87% en Cataluña, que suma el segundo descenso consecutivo de este indicador, y la incidencia acumulada se mantiene en cifras similares a las de hace una semana. “Contaba que estaríamos peor”, concreta Evelyn Shaw, subdirectora del proceso de hospitalización y gestión de pacientes del centro. “Pero vamos subiendo; y creo que llegaremos a cifras más altas. Pensábamos que todo iría más rápido, sí, pero la subida vendrá, es seguro”, añade. Caballero coincide en la previsión: “Esperábamos una situación peor tras la movilidad de Semana Santa”. Los expertos en proyecciones de la pandemia, sin embargo, vaticinan un aumento de los indicadores en los próximos días.
La fragilidad de los indicadores invita a pensar que los hospitales seguirán sufriendo una presión asistencial aún mayor. “En las UCI no hemos tocado techo, y esperamos un incremento de los críticos”, vaticina Caballero.
En el hospital de Bellvitge, la actividad no urgente aún se mantiene. “Pero si el incremento de críticos sigue, llenaremos dos unidades de UCI y tendremos que hacer malabares para mantener la actividad quirúrgica normal”, avisa Shaw. En el hospital de Tarragona, en el Germans Trias de Badalona y en el del Mar tampoco han desprogramado aún su actividad quirúrgica. “Tenemos que estar preparados y lo estamos”, asegura Castells. El jefe de Epidemiología reclama seguir administrando las vacunas para salir de la crisis y garantizar el estudio de los contactos de los positivos. “Lo esencial y prioritario es vacunar al máximo a los colectivos vulnerables de ingresar en los hospitales”, pide, “pero también hacer un seguimiento adecuado de los positivos y los confinamientos”.
Los alumnos confinados casi se duplican día tras día
Los alumnos catalanes confinados por ser positivos o contactos directos de covid han crecido de nuevo por cuarto día consecutivo. La comunidad suma casi 16.000 estudiantes confinados por los cerca de 8.500 del viernes, por lo que los alumnos en cuarentena se han doblado. Así se desprende de los datos que la consejería de Educación publicó este lunes, a partir de la información aportada por los propios centros educativos.
La situación actual repite los mismos patrones que vivió el sector educativo tras las vacaciones de Navidad. En aquella ocasión el aumento fue aún más exponencial en el inicio del segundo trimestre, ya que pasó en los primeros seis días lectivos de 1.800 a 38.000 alumnos confinados. El departamento ya avisó entonces que preveía aquel aumento. Los estudiantes en cuarentena se han prácticamente duplicado día tras día: si el martes la cifra era de 1.898 alumnos confinados, el miércoles pasó a 2.226, el jueves se multiplicó hasta los 4.340 y el sábado se volvió a doblar hasta 8.457.
También se han doblado respecto los grupos escolares en cuarentena, al pasar de los 321 del viernes a los 649 de ayer, y pertenecen a 454 centros educativos, lo que implica una afectación en el 8,89 % del total de 5.104 escuelas e institutos catalanes.
Por razones epidemiológicas están completamente cerrados cinco centros educativos situados en las comarcas de Noguera, Pallars Sobirà, Anoia, Osona y Garrotxa.