El PP retrocede y el PSOE vuelve a igualarlo en el primer puesto en vísperas del año electoral

Pedro Sánchez rozaría la mayoría absoluta en el Congreso si mantuviese sus actuales alianzas frente a una derecha que no suma

La izquierda recupera el resuello. El PSOE vuelve a estar en condiciones de disputar al PP el primer puesto en unas hipotéticas elecciones generales y coser una mayoría parlamentaria parecida a la actual. El barómetro de diciembre de EL PAÍS y la Cadena SER muestra un cierto vuelco en la tendencia que venía marcando desde la pasada primavera. Por primera vez desde mayo, cuando Alberto Núñez Feijóo asumió el timón del PP, los populares retroceden —...

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La izquierda recupera el resuello. El PSOE vuelve a estar en condiciones de disputar al PP el primer puesto en unas hipotéticas elecciones generales y coser una mayoría parlamentaria parecida a la actual. El barómetro de diciembre de EL PAÍS y la Cadena SER muestra un cierto vuelco en la tendencia que venía marcando desde la pasada primavera. Por primera vez desde mayo, cuando Alberto Núñez Feijóo asumió el timón del PP, los populares retroceden —casi dos puntos respecto al mes anterior— según el estudio de 40dB. El PSOE cosecha su mejor resultado de todo 2022 y se coloca en situación de empate técnico con el primer partido de la oposición, en vísperas de un año cargado de citas electorales, con autonómicas, municipales y generales en el horizonte.

Tras la llegada de Feijóo, el barómetro de 40dB. comenzó a situar al PP pisándole los talones al PSOE hasta sobrepasarlo en el estudio realizado en julio. La brecha favorable a los populares fue ensanchándose y alcanzó los tres puntos en octubre. Todo eso se ha diluido en el último mes, hasta comprimir a solo tres décimas (28,1% frente a 27,8%) la ventaja del PP, lo que en la práctica equivale a un empate técnico entre los dos grandes partidos.

Traducido todo esto a escaños, los populares reunirían 120 por 112 de los socialistas. Pero la configuración del resto del Congreso haría imposible una mayoría de la derecha y dejaría a Pedro Sánchez en condiciones de repetir Gobierno con pactos muy parecidos a los actuales, ya que la suma de todos esos grupos se situaría al borde de la mayoría absoluta.

Por primera vez en todo el año, el PSOE estaría muy cerca de repetir los resultados de las últimas elecciones, con unas expectativas de voto del 27,8%, solo medio punto menos que entonces. Uno de los datos que alienta más el optimismo de los socialistas es que han logrado frenar la fuga de votos hacia el PP que el instituto demoscópico había detectado tras el relevo en el liderazgo de los populares. Según el barómetro de diciembre, el PSOE aún perdería un 5% de su electorado en favor del PP, pero esa cifra se ha reducido en 1,3 puntos en el último mes y en más de tres respecto al momento álgido de lo que se vino a denominar efecto Feijóo, alrededor del verano. Al tiempo, el partido de Pedro Sánchez recupera casi un 13% de los antiguos votantes de Unidas Podemos, tres puntos más que en el mes anterior

La investigación de 40dB. se llevó a cabo entre los días 23 y 26 de noviembre, en medio de debates políticos comprometidos para el Gobierno, como la reducción de penas a agresores sexuales en aplicación de la ley del solo sí es sí o la reforma del delito de sedición, que aliviará la situación judicial de algunos de los implicados en el procés independentista catalán de 2017. De momento, el trabajo no detecta que estos asuntos pasen factura al PSOE, del que se valoran más sus actuaciones en el Gobierno.

El barómetro del pasado mes ya apuntaba a un frenazo del PP y a un desgaste de la figura de Feijóo, pero aún no se advertían caídas en sus expectativas de voto y seguía manteniendo su ventaja sobre los socialistas. Todo ha cambiado en las últimas cuatro semanas, en las que los populares caen del 29,9% al 28,1%, lo que les reportaría siete escaños menos de los previstos anteriormente. La mejor noticia para Feijóo es que aún está muy por encima —tres puntos— de las cifras que obtenía a principio de año el PP de Pablo Casado, antes de que estallase la crisis interna en el partido.

En toda la secuencia anual de los barómetros se ha observado una especie de flujo de vasos comunicantes entre los populares y Vox. En marzo, con el PP agitándose en una guerra interna, la extrema derecha llegó a rozar el 20% y a pisar los talones a su principal competidor. Esa corriente de doble dirección vuelve a observarse ahora, aunque en dimensiones mucho más moderadas: el PP retrocede mientras Vox frena una caída iniciada hace ocho meses. Es la primera vez desde mayo que el partido de Santiago Abascal no cede posiciones y hasta presenta una leve ganancia (tres décimas). Vox sigue teniendo una importante sangría de votos hacia su competidor en la derecha, un 9,4%, aunque lo compensa parcialmente al arrebatar a los populares un porcentaje similar, que ha crecido dos puntos en un mes. Este pequeño avance no es suficiente para evitar que la formación de Abascal continúe por debajo de sus resultados de noviembre 2019. Si se celebrasen ahora elecciones generales, el instituto demoscópico calcula que vería mermada en 11 escaños su actual representación en el Congreso (52). Se quedaría en el 14,1%, 1,1 puntos menos que en la última convocatoria electoral.

Las fechas de la encuesta también coincidieron con el recrudecimiento de las batallas internas en Unidas Podemos, entre el partido fundado por Pablo Iglesias y las demás formaciones agrupadas en torno a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz. En este caso tampoco se aprecia una consecuencia inmediata. UP prácticamente repite sus resultados del barómetro anterior y se mantiene en 30 escaños, cinco menos que ahora. Pero aumentan sus fugas hacia el PSOE y también hacia Más País, cuya coalición con Compromís sumaría un escaño a sus tres actuales.

Agonía de Ciudadanos

La agonía de Ciudadanos parece no tener fin. Hay un leve repunte en su bajísima fidelidad de voto (no llega a uno de cada tres que lo apoyaron en 2019), insuficiente para evitar que su mejor pronóstico sea quedarse con un solo diputado.

En el campo nacionalista casi nada se mueve. Solo el BNG presenta una consolidada tendencia al alza, que le podría reportar dos diputados, mientras los demás mantienen sus fuerzas. Eso que se ha venido llamando “bloque de investidura” —siempre flexible y sometido a tensiones— llegaría hasta los 174 escaños, sumados los de PSOE, UP, ERC, PNV, EH Bildu, Más País-Compromís, BNG, PRC y Teruel Existe. Con lograr la abstención de los dos de Coalición Canaria y el único de la CUP, Sánchez podría repetir Gobierno, si bien con más apuros que ahora. Es la primera vez en todo el año que una mayoría alternativa a la de la derecha no dependería de Junts. El PP, por el contrario, lo tendría imposible: no suma más de 164 escaños con Vox, los foralistas navarros y Ciudadanos.

EL PAÍS y la SER ofrecerán este martes una segunda entrega de la encuesta. A partir de ese día, y como viene siendo habitual, se podrán consultar todos los datos internos de la investigación de 40dB. en las páginas web del periódico y de la cadena de emisoras de radio.

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