Misterio resuelto: el bloguero Anatoli Sharii sigue en España, según concluye el juez tras darle por huido a Italia
La Audiencia archiva ahora la extradición del periodista ucranio reclamado por “alta traición” porque su país no ha presentado la demanda para entregarlo
Misterio resuelto. El magistrado Santiago Pedraz ha concluido que Anatoli Sharii, un periodista y político ucranio reclamado por su país por “alta traición”, se encuentra en España. El juez de la Audiencia Nacional así lo detalla en un auto firmado este mismo martes, donde acepta el recurso presentado por la defensa contra la decisión de archivar la extradición del reportero basándose en que ...
Misterio resuelto. El magistrado Santiago Pedraz ha concluido que Anatoli Sharii, un periodista y político ucranio reclamado por su país por “alta traición”, se encuentra en España. El juez de la Audiencia Nacional así lo detalla en un auto firmado este mismo martes, donde acepta el recurso presentado por la defensa contra la decisión de archivar la extradición del reportero basándose en que este habría supuestamente salido de Cataluña y se habría desplazado a Italia. Una teoría sobre la huida que los servicios de inteligencia ucranios hicieron llegar al instructor, pero que su abogado, Gonzalo Boye, siempre negó.
Según el dictamen rubricado este martes por Pedraz, al que ha tenido acceso EL PAÍS, la documentación aportada por la defensa demuestra que Anatoli Sharii “se encuentra en España”. Esta resolución insufla aire al periodista, que temía que la decisión de archivar su extradición por su supuesta salida del país rumbo a Italia provocara que volvieran a detenerle en Cataluña, como sucedió el pasado mayo, cuando se le prendió en su casa de la localidad costera de Roda de Berà (Tarragona), donde lleva afincado desde hace años. Boye explicó que, al darse carpetazo a la causa por ese motivo, su nombre volvería a incorporarse a las bases policiales de búsqueda y captura.
Pero, además de aceptar estos argumentos de la defensa, Pedraz ha tomado otra decisión en favor del periodista ucranio. El juez ha acordado archivar la extradición por otro motivo distinto: Ucrania no ha presentado todavía la demanda de entrega del reportero, ni la “documentación pertinente”. “Es obvio que este expediente no puede mantenerse abierto sine die (no se sabe si se recibirá o no esa demanda y documentos) y con obvio perjuicio para el reclamado”, expone el magistrado.
Ucrania reclama a este periodista y bloguero, con más de tres millones de seguidores en YouTube, por supuestos delitos de “alta traición e incitación al odio”. El país de Europa del Este le acusa de estar al servicio de Rusia desde 2014, de incentivar las “tendencias separatistas” y de ayudar a Moscú con sus actividades “subversivas” durante el conflicto bélico de 2014 en el Donbás. Le atribuye la publicación de información falsa y de, a través de internet, “incitar al odio interétnico”.
Una imputación que él niega: “No lo soy [prorruso]. No tengo contactos con Rusia”, dijo en conversación con EL PAÍS en mayo de 2021. Muy crítico con las políticas del presidente Volodímir Zelenski, Sharii abandonó Ucrania hace una década. Según dice, porque se sentía perseguido por denunciar casos de corrupción política. A continuación, se instaló en Roda de Berà. El periodista detalla que, desde entonces, ha recibido en España multitud de amenazas de grupos neonazis ucranios.