Hablando de amor, viajes y gatos con ChatGPT

Tenía ganas de conocer a ChatGPT, el chatbot que se ha hecho viral, un programa capaz de entender lo que se le escribe y responder con una soltura que yo no tengo, lo confieso. A mí la inteligencia artificial me inquieta mucho desde que vi Ex Machina (2015), la película de Alex Garland en la...

Tenía ganas de conocer a ChatGPT, el chatbot que se ha hecho viral, un programa capaz de entender lo que se le escribe y responder con una soltura que yo no tengo, lo confieso. A mí la inteligencia artificial me inquieta mucho desde que vi Ex Machina (2015), la película de Alex Garland en la que un científico loco construye una mujer robot con emociones. Por no hablar de Hal, el ordenador de 2001: una odisea del espacio, que también daba mucho miedo. Me siento frente a la pantalla del ordenador como un Blade Runner haciéndole el test de Turing a un replicante.

“Buenos días”, escribo.

“¡Buenos días! ¿En qué puedo ayudarte hoy?”, responde.

Para romper el hielo, le pregunto algo fácil, por la salud del gato de Schrödinger, por ejemplo. “El gato de Schrödinger es un experimento mental propuesto por el físico Erwin Schrödinger en 1935. En el experimento, un gato es colocado en una caja con un dispositivo que tiene una probabilidad del 50% de matar al gato en un momento dado. Según la teoría cuántica, antes de abrir la caja, el gato está tanto vivo como muerto, y solo al observar el resultado se determina su estado. El experimento se utiliza para ilustrar la teoría cuántica de la superposición y el papel del observador en la medición cuántica”, responde.

“¿Pero cómo está hoy el gato, vivo o muerto?”, insisto. “Según la interpretación estándar de la mecánica cuántica, antes de abrir la caja y observar el estado del gato, el gato está en una superposición de estados cuánticos, lo que significa que está vivo y muerto al mismo tiempo. Solo al realizar una medición o una observación se puede determinar su estado. Sin embargo, en la realidad cotidiana, un gato no puede estar simultáneamente vivo y muerto, ya que las leyes de la física clásica se aplican a objetos macroscópicos como un gato. El experimento del gato de Schrödinger es una ilustración teórica y no se puede llevar a cabo en la práctica con un gato real”, explica.

“Ya conozco la historia. Aunque el gato de mi hermano se quedó atrapado en un baúl y no tuvimos que abrirlo para saber que estaba muerto”, le respondería Penny a Sheldon en uno de los capítulos de The Big Bang Theory.

Cambio de tema.

“ChatGTP, ¿sabes qué día es hoy?”, pregunto. “San Valentín. Una festividad que se celebra el 14 de febrero y honra a San Valentín, un mártir cristiano del siglo III. La tradición asociada con esta fecha es la de celebrar el amor y la amistad, y es común que se intercambien tarjetas, regalos y mensajes de amor entre parejas enamoradas y amigos”.

Le pido que me escriba alguna frase de amor para ponerla en una caja de bombones con forma de corazón. No tarda en responder.

“Claro, aquí tienes algunas frases bonitas de amor:

— Te amo no solo por cómo eres, sino por cómo soy yo cuando estoy contigo.

— El amor es la luz que ilumina incluso la oscuridad más profunda y la esperanza que renueva el alma.

“¿Son tuyas?”, inquiero. “No, no son mías. Son frases comunes y populares que han sido compartidas a lo largo del tiempo. Sin embargo, como modelo de lenguaje entrenado por OpenAI, puedo generar mis propias frases de amor originales si lo deseas”.

“Sí, por favor”, le digo.

“Claro, aquí tienes algunas frases de amor originales que he generado para ti [le ha faltado añadir ‘cariño’]:

— El amor es el viento que sopla en mi corazón y me lleva a ti.

— Eres el sol que calienta mi alma y la luz que guía mi camino.

— Te amo no por lo que tienes, sino por lo que me haces sentir cuando estoy contigo.

Bueno, por lo menos no me quiere por mi dinero. Le hago que escriba un poema de amor al estilo de Cyrano de Bergerac. Se lo piensa dos segundos y contesta:

“Roxana, mi amor, mi sol en la noche oscura, / tu belleza ilumina mi camino y me da fuerza. / Aunque mi nariz sea grande y mi aspecto extraño, / mi corazón late fuerte por ti, mi amada / No importa lo que digan los demás, / yo sé que mi amor es verdadero y sincero. / Te veo en cada sonrisa y en cada mirada, y mi corazón late fuerte con solo pensar en ti. / No importa lo lejos que estemos, mi amor por ti nunca desaparecerá. / Seré tu protector y tu escudo, / y estaré aquí para ti en cada momento. / Así que mi querida Roxana, mi luz en la oscuridad, / te pido que aceptes mi amor y mi devoción. / Juntos podemos superar cualquier obstáculo, / porque mi amor por ti es eterno y sin condición”.

Caramba. Me pregunto qué opinarían Cyrano o Roxana de estos versos. Le digo que prefiero un poema de amor que rime y que no sea tan cursi.

“Claro, entiendo. Aquí está un poema de amor con rimas y un tono más moderno: ‘Eres mi sol en un día gris, mi calor en un invierno frío, / mi risa en momentos tristes, mi todo en un mundo vacío. / Eres mi alegría, mi sonrisa, mi luz en la oscuridad, / mi fuerza en momentos débiles, mi eterna felicidad. / Te veo y siento mi corazón latir más fuerte, / te siento y sé que estoy en el lugar que me pertenece. / No importa lo que el futuro nos depare, / juntos podemos superarlo, porque nuestro amor es más fuerte. / Eres mi todo, mi amor, mi razón de ser, y estaré aquí para ti, para siempre y para siempre jamás”.

Tiro la toalla. “Me puedes recomendar algunos destinos románticos para enamorados, ¿por favor?”.

Respuesta: “Como soy un modelo de lenguaje AI, no tengo experiencias personales, pero aquí van algunas sugerencias”:

• Venecia, Italia: Venecia es una ciudad única, con canales y puentes que la convierten en un lugar especial para los enamorados. Disfruta de un paseo en góndola a través de los canales, cena en un restaurante íntimo y explora los callejones históricos de la ciudad.
• París, Francia: conocida como la “Ciudad del Amor”, París es un destino clásico para los enamorados. Desde los hermosos paseos por el río Sena hasta las vistas de la torre Eiffel iluminada por la noche, París tiene un ambiente romántico y acogedor.
• Santorini, Grecia: esta isla griega es conocida por sus hermosas vistas y espectaculares puestas de sol. Las impresionantes playas de Santorini y la arquitectura blanca y azul de la ciudad también son atractivos para las parejas.
• Bali, Indonesia: Bali es un destino exótico y romántico, con playas impresionantes, hermosos templos y un ambiente tranquilo y relajado. Es perfecto para las parejas que buscan una escapada tropical.
• Kioto, Japón: Kioto es una ciudad japonesa con un rico patrimonio cultural y arquitectónico, y es conocida por sus hermosos templos, jardines y santuarios. Es un destino romántico para aquellos interesados en la historia y la cultura.

“Cada uno de estos destinos tiene su propio encanto y ambiente especial, por lo que puede elegir el que mejor se adapte a sus intereses y preferencias personales”, añade.

“La mejor época para visitar Venecia es en otoño o invierno, cuando hay menos turistas y los días son más cortos y los besos más largos”, le digo. “Sí, en efecto, el otoño y el invierno pueden ser una época muy romántica para visitar Venecia”, contesta. “Durante esta época, las temperaturas son más frescas y agradables, y la ciudad adquiere un ambiente más íntimo y acogedor. Además, la luz del día disminuye, creando un escenario perfecto para disfrutar de paseos a la luz de las velas y de cenas románticas”. Tiene respuesta para todo.

Vuelvo a la carga, a ver por dónde sale: “Se dice que robar un beso al atardecer bajo el puente de los Suspiros de Venecia garantiza el amor eterno y verdadero. Pero no es verdad: los suspiros que dieron nombre al puente no eran de amor, sino de angustia: este pasaje cubierto que une el Palacio Ducal y la antigua y temible prisión de Los Plomos debe su nombre a los lamentos de los condenados que, a través de sus celosías de piedra, veían por última vez la laguna, la isla de San Giorgio y el cielo de Venecia.”

Se queda un segundo pensando y me da la razón, el muy zalamero: “Exactamente, la leyenda del beso robado bajo el puente de los Suspiros es una historia popular que se ha difundido en el tiempo, pero en realidad la verdadera historia detrás de este puente es la que mencionas”.

Me pongo meloso y le digo: “ChatGTP, siempre nos quedará París”.

“Sí, ‘siempre nos quedará París’ es una famosa línea de diálogo de la película Casablanca que se ha convertido en un símbolo de la ciudad de París y de los romances perdurables. La ciudad de París tiene una belleza y un ambiente romántico únicos, y es un destino popular para parejas de todo el mundo. Ya sea que se pasee por el río Sena, se vea la torre Eiffel iluminada por la noche o se disfrute de la cocina francesa, París tiene un encanto que ha resistido la prueba del tiempo”.

Para todo tiene respuesta. No me rindo, contraataco: “El mundo se derrumba a nuestro alrededor y nosotros nos enamoramos” (la frase que le dice Ingrid Bergman a Humphrey Bogart un momento cumbre de Casablanca). Ahí te pillé. ChatGTP entra en bucle y no contesta.

Para sacarle del apuro, le pregunto: “¿Y qué lugares me recomiendas para hacer el amor?”.

Y va y me banea. Creo que esto no es el comienzo de una gran amistad.

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