“En 2038, todas las canciones del mundo serán versiones de Pitingo”

FERNANDO MOLERES

FERNANDO Calizo Carglass (Motilla del Palancar, 1974)  es experto en la industria musical y asesora a las grandes compañías en la detección de hits y nuevos talentos artísticos. Ha sido el primero, pero no el único, en advertir del “efecto Pitingo”. Las versiones aflamencadas del artista podrían imponerse en unos años hasta representar el 90% de la industria discográfica mundial.

¿En qué se basa para afirmar que en el futuro solo escucharemos versiones de Pitingo? En el análisis de las tendencias de consumo musical. Hay personas hoy día que no saben que ...

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FERNANDO Calizo Carglass (Motilla del Palancar, 1974)  es experto en la industria musical y asesora a las grandes compañías en la detección de hits y nuevos talentos artísticos. Ha sido el primero, pero no el único, en advertir del “efecto Pitingo”. Las versiones aflamencadas del artista podrían imponerse en unos años hasta representar el 90% de la industria discográfica mundial.

¿En qué se basa para afirmar que en el futuro solo escucharemos versiones de Pitingo? En el análisis de las tendencias de consumo musical. Hay personas hoy día que no saben que Smells Like Teen Spirit es una canción de Nirvana. Solo conocen la versión de Pitingo. ¿Sabe usted cómo se llama la granja en la que crían los pollos que compra en el supermercado? ¿Verdad que no? Con las canciones pasará lo mismo.

¿Qué podemos hacer, como ciudadanos, para prevenir esto? Si le gusta Pitingo, déjese llevar. Si es usted un pureta y prefiere escuchar las canciones del artista original, más le vale ir adquiriendo las grabaciones antes de que dejen de distribuirse. Serán piezas de coleccionista.

Cuesta creer que artistas como Adele, Taylor Swift o los Rolling Stones vayan a ser eclipsados por el flamenco y el soul latino de un artista de Huelva. Por eso existen los negacionistas. Gente que dice que somos demasiado tremendistas. Yo le aseguro que estos músicos a los que usted cita, y otros muchos, están acojonados. Por eso, muchos lanzan líneas de ropa y accesorios. Buscan otros nichos de mercado en los que Pitingo no haya entrado aún. Y señalo lo de aún.

Hace años también se temió por la música clásica con el auge de Luis Cobos, pero luego la sangre no llegó al río. El efecto que va a tener Pitingo es incomparable. Apple barrió a Nokia con el iPhone. Pitingo barrerá la música popular.

No me queda claro si es usted fan o ‘hater’ de Pitingo. Es que no le sabría decir porque hasta a mí, como consumidor, me cuesta saber si estoy escuchando una versión o no. Una vez se convierta en el estándar, plantearte si te gusta Pitingo será como preguntarte si te gusta la música.

El mes que viene se celebrará una cumbre en Nueva York para hablar de este tema. ¿Le ha costado implicar a empresas e instituciones? Los países líderes de la industria musical se comprometieron desde el principio. Se juegan mucho. Los demás, entre los que incluyo a España, van a remolque. Aquí no estamos avispados con la que se avecina.

¿Y Pitingo? ¿Es consciente de todo esto? Dudo que sea conocedor de la responsabilidad que tiene. Del hecho de que sus versiones serán todo lo que llegará a nuestros oídos. ¿Quién podría crear bajo tanta presión?

Crear igual no, pero versionar… Él no sabe que versiona, igual que usted no se plantea de dónde viene el aire que respira.

¿Y qué motivación tendrán los nuevos talentos para dedicarse a la música? El gran aliciente será ser versionado por Pitingo. Llegar a la gente a través de su flamenco.

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