Cartas al director

La vida en los libros

Diariamente estamos rodeados de joyas, maravillas que albergan en sus entrañas una grandísima parte de la riqueza mundial que posee la humanidad, pues son el alma y la inmortalidad de todo escritor y escritora. Las librerías, sean antiquísimas o recientes, sumergen poderosamente a todo aquel curioso que osa adentrarse en sus profundidades. Su mágica atracción te somete a vagar por múltiples mundos. Cuando has emprendido tan fascinante viaje, el tiempo se detiene, dejándote solo para descubrir la vastedad del portentoso paraje en el que te encuentras. Sientes tal deleite que lo que han sido hor...

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Diariamente estamos rodeados de joyas, maravillas que albergan en sus entrañas una grandísima parte de la riqueza mundial que posee la humanidad, pues son el alma y la inmortalidad de todo escritor y escritora. Las librerías, sean antiquísimas o recientes, sumergen poderosamente a todo aquel curioso que osa adentrarse en sus profundidades. Su mágica atracción te somete a vagar por múltiples mundos. Cuando has emprendido tan fascinante viaje, el tiempo se detiene, dejándote solo para descubrir la vastedad del portentoso paraje en el que te encuentras. Sientes tal deleite que lo que han sido horas en nuestro apresurado tiempo fuera de esas paredes, únicamente han sido para ti pocos minutos. Es inexplicable la fuerza y la vida que moran en esas estancias.

Por eso, por hacerme rememorar una vez más estas sensaciones, os doy las gracias. La sección que el domingo 8 de diciembre dedicasteis a las librerías es impresionante, fantástica y formidable.

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