Cartas al director

Leyes para la prostitución

De nuevo el tema recurrente de la prostitución. Todos los partidos se han planteado reiteradamente la regularización de la prostitución en los últimos años. La idea es que deje de estar tipificada como delincuencia y que las personas que se prostituyen consigan condiciones laborales y sanitarias dignas, como las de cualquier persona que trabaja y cotiza a la Seguridad Social.

Pero, como en tantas cosas, los gobernantes no acaban de “coger el toro por los cuernos” y el ejercicio de la prostitución, aunque está tipificado penalmente y castigado con hasta cuatro años de prisión, en sí mism...

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De nuevo el tema recurrente de la prostitución. Todos los partidos se han planteado reiteradamente la regularización de la prostitución en los últimos años. La idea es que deje de estar tipificada como delincuencia y que las personas que se prostituyen consigan condiciones laborales y sanitarias dignas, como las de cualquier persona que trabaja y cotiza a la Seguridad Social.

Pero, como en tantas cosas, los gobernantes no acaban de “coger el toro por los cuernos” y el ejercicio de la prostitución, aunque está tipificado penalmente y castigado con hasta cuatro años de prisión, en sí misma la prostitución no está perseguida por la ley española.

Así, que ahí nos encontramos municipios como los del Maresme luchando con ordenanzas, simples piedras, en un campo de batalla donde no paran de recibir cañonazos de inversores extranjeros que buscan macrolocales para sus clubes de alterne. ¡Leyes, señores, leyes! Leyes estatales que regularicen, ordenen, tipifiquen, establezcan condiciones laborales y sanitarias, y que acaben con la llegada ilegal de personas obligadas por las mafias.

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Si no les convencen mis argumentos, miremos la situación de nuestro país y pensemos en la recaudación que haría la Hacienda pública si se regularizara esto, estamos hablando, según algunos expertos de más de 2.500 millones de euros anuales.

Basta ya de fariseísmo.— Susana Fuentes Gallego.

 

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