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Fotogalería: Fetiches de Oscar

El tesoro de los últimos veinte años de éxitos del cine español en Hollywood

El vestido y sombrero de Penélope en ‘Vicky Cristina Barcelona’ (mejor actriz de reparto). Resulta difícil resistir la tentación de olerlo para saber si conserva algún aroma de la actriz que lo llevó puesto bajo las órdenes de Woody Allen. Pero este vestido lleva demasiado tiempo en un almacén y solo rezuma humedad. El sombrero, de 1900, también.Federico Reparaz
El zapato del director de ‘Balseros’ (candidato al mejor documental). Carles Bosch llegó a Hollywood dispuesto a pisar la alfombra roja junto a Josep Maria Domènech con unos zapatos que no pasaron el filtro de la asesora de imagen de los directores. Así que Bosch corrió hasta Rodeo Drive, donde compró estos carísimos zapatos a los que no ha dado mucha coba después de aquello.Federico Reparaz
La cabeza del Pálido (mejor maquillaje). Mide 36 centímetros de alto por otros 15 de ancho. Es de silicona, pesa más de un kilo y es la máscara del Pálido que llevaba el actor que dio vida a este personaje y al Fauno de El laberinto del Fauno. Sus creadores, David Martí y Montse Ribé, la conservan en un museo de la nave barcelonesa donde trabajan junto al resto de sus creaciones. Con el Pálido y el Fauno ganaron el Oscar en 2006.Federico Reparaz
El libreto de ‘Hable con ella’ (mejor guion original). Historia de personajes que trasladan la cotidianeidad hacia situaciones límite, su lectura en el cuaderno original, trufada con decenas de anotaciones del autor en las que acaba sonando su propia voz a través de los diálogos de los protagonistas, esboza un nuevo visionado de uno de los títulos más laureados internacionalmente de la reciente filmografía de Pedro Almodóvar.Federico Reparaz
La corbata de Jorge Drexler (mejor banda sonora original). Con ella subió a recoger el Oscar y acabó susurrando el estribillo de Al otro lado del río, que los productores de la ceremonia no le habían dejado cantar en directo por considerarle “poco conocido” para el público estadounidense. “Al fin, subí y canté… ¡Y por primera vez en esta gala, en castellano!”, recuerda Drexler.Federico Reparaz
La grabadora de Borja Cobeaga (candidato al mejor cortometraje). “Practique su discurso y recuerde que, en caso de ganar, no puede pasar de 45 segundos”. Con el citado prólogo, el director de Éramos pocos recibió esta grabadora en la ceremonia de candidatos al Oscar de 2007. Solo consiguió hacerla funcionar una vez. No ganó, pero desde entonces pertenece a la Academia de Hollywood.Federico Reparaz
La partitura de ‘El laberinto del Fauno’ (candidato a mejor banda sonora). Javier Navarrete tardó unas diez semanas en componer la música original de la exitosa cinta de Guillermo del Toro. El director le había pedido una partitura muy melódica, lo que permitió al músico descubrir un registro que en cierto modo era nuevo para él. Hoy ultima su proyecto para “una película pequeña y hermosa” de Neil Jordan.Federico Reparaz
La guitarra de Nacho Vigalondo (candidato al mejor cortometraje). Con ella escribió el guion de 7:35 de la mañana. “Este corto es, en esencia, una canción. Solicité una ayuda del Gobierno vasco y canté aquel tema con esta guitarra ante la comisión. El proyecto pasó la criba. Pude rodar el corto y nacer como director. También es la guitarra que salió en pantalla”.Federico Reparaz