Sánchez anuncia la reducción del horario lectivo del profesorado y 175 millones para plazas de 0-3 años para niños de familias vulnerables
Casi todas las comunidades ya han reducido a 23 y 18 horas el tiempo en el aula de los docentes en primaria y secundaria, pero el Gobierno quiere “blindar” ese máximo por ley
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles en una escuela infantil de Getafe, Madrid, dos iniciativas educativas. De un lado, la puesta en marcha de un programa dotado con 175 millones de euros para financiar plazas públicas completamente gratuitas para niños que vivan en familias bajo el umbral de la pobreza en el primer ciclo de infantil, el 0-3 años. Y, del otro, el blindaje por ley de la reducción del horario lectivo del profesorado en el aula de Infantil, Primaria, ESO y Bachillerato, para que sean de un máximo de 23 semanales en las escuelas y de 18 en los institutos. Esas horas ya están incluidas como recomendación en la actual ley educativa, la Lomloe, aprobada en 2020, y, de hecho, casi todas las comunidades las aplican. Solo quedan tres excepciones: Madrid, Galicia y Castilla-La Mancha. Fuentes del Ministerio de Educación, que dirige Pilar Alegría, que ha acompañado a Sánchez en Getafe, han señalado que la intención de la medida es “blindar” ese horario, de forma que no se pueda volver a subir por parte de las comunidades autónomas por sí solas en caso de que llevaran a cabo recortes.
El presidente ha indicado que el tope de horas de clase (al margen del tiempo que el profesorado dedica a preparar materiales, coordinarse y otras funciones) se tramitará como ley, es decir, que necesitará reunir apoyos de otras fuerzas políticas en el Congreso para que salga adelante. El horario del profesorado fue ampliado en 2012 por el Gobierno del PP, dentro de los recortes que aplicó en plena crisis financiera, que lo situó en 25 horas semanales en los colegios y 20 en los institutos.
El proyecto de ley con el que el Gobierno intentará fijar el horario lectivo introducirá algún tipo de bajada en la ratio de estudiantes por clase, una de las principales reivindicaciones del profesorado, ha adelantado Sánchez, que no ha ofrecido de momento más detalles. Y abordará también la reducción de “la carga burocrática” que soportan los docentes, otra de sus peticiones centrales.
Aunque se han producido negociaciones para reducirlas, señala el portavoz del STES, Fernando Villalba, en estos momentos las horas lectivas en Madrid se encuentran todavía en 25 horas en primaria y en 19 en secundaria. En Galicia, en 23 horas en primaria y 20 en secundaria. Y en Castilla-La Mancha, en 24 y 19 (aunque el cambio está cerrado ya para cambiarlo a partir del año que viene).
Plazas gratuitas en infantil
En el caso del nuevo programa para el 0-3, la idea del Gobierno es dar ayudas a familias que se encuentran bajo el umbral de pobreza para que puedan matricular a sus hijas de forma completamente gratuita. El objetivo, ha dicho Sánchez, es “facilitar la universalización de la escolarización en la etapa de educación infantil sin reparos económicos ni culturales”. El programa se pondrá en marcha en 2026 y se ejecutará en dos ejercicios presupuestarios.
El Ministerio de Educación se reunirá con los sindicatos de enseñanza el martes de la semana que viene, en el marco de la negociación para la reforma del profesorado que arrancó a principios de año y que de momento ha avanzado poco. Las centrales sindicales esperan que el Gobierno concrete en el encuentro sus propuestas en materia de ratios y reducción de burocracia adelantadas por Sánchez, si bien este miércoles ya han advertido de que las medidas puestas este miércoles sobre la mesa “se quedan muy cortas”, en palabras de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras.
CC OO ha reclamado medidas como la bajada de ratios, la equiparación en el escalafón del sector público de los maestros con el profesorado de secundaria, el hecho de que el alumnado con necesidad de apoyo educativo cuente doble a efectos de ratio de clase, y la jubilación anticipada docente. “Analizaremos con detenimiento la letra pequeña de la propuesta que se nos presentará la semana que viene”, ha señalado el portavoz del STES. Mientras que el CSIF ha señalado que permanecerá “vigilante y se reserva todo tipo de acciones para lograr las mejoras que pide el profesorado”.
Tramitar como proyecto de ley los cambios del profesorado en materia de horario y ratio permitirá al Gobierno, si logra aprobarlo, que sea de obligado cumplimiento, a diferencia de lo que podría conseguir si, por ejemplo, hubiera vinculado la reducción del número de estudiantes por clase a la entrega por parte del ministerio de fondos específicos a las comunidades que decidieran aplicar la medida. Al mismo tiempo, sin embargo, aprobar una ley llevará más tiempo y el éxito de la iniciativa resulta incierto. Entre otros motivos, porque los partidos nacionalistas suelen ser reticentes a aprobar límites de este tipo en la legislación educativa, como se comprobó durante la tramitación de la Lomloe. En todo caso, obligará a que todos los grupos del Congreso se retraten: ¿están a favor o en contra de reducir la ratio como reclama el profesorado?