Las bolsas europeas cierran con pérdidas tras una semana de fuertes altibajos
Los parqués acaban la semana con caídas de entre un 1% y un 2% por la incertidumbre y los riesgos geopolíticos en Ucrania
Los coletazos de la primera reunión del año de la Reserva Federal todavía azuzan los nervios de los inversores. Ante el temor a una inflación creciente, su presidente Jerome Powell confirmó el miércoles su intención de subir los tipos de interés en la reunión de forma inminente, con toda probabilidad en marzo, y de poner fin al arsenal desplegado para compensar el batacazo provocado por la pandemia. Los parqués, sin embargo, también ba...
Los coletazos de la primera reunión del año de la Reserva Federal todavía azuzan los nervios de los inversores. Ante el temor a una inflación creciente, su presidente Jerome Powell confirmó el miércoles su intención de subir los tipos de interés en la reunión de forma inminente, con toda probabilidad en marzo, y de poner fin al arsenal desplegado para compensar el batacazo provocado por la pandemia. Los parqués, sin embargo, también bailan al compás de las tensiones en Ucrania y de la escalada entre Rusia y Occidente. El dato del PIB alemán hecho público este viernes, que señala un frenazo a la expansión de la economía más fuerte de Europa en el cuarto trimestre del año (-0,7%), ha acabado por aportar todavía más incertidumbre a los mercados financieros. Todos esos riesgos han nublado el horizonte de las Bolsas europeas, que tras unos días de elevada volatilidad han cerrado la última semana de enero teñidas de rojo.
Los principales índices del Viejo Continente han registrado caídas entre el 1% y el 2%. Fráncfort se anota el peor resultado (-1,32%), mientras que París ha recortado sus pérdidas hasta un 0,82%. El Ibex 35 ha cedido un 1,1%, después de moderar los descensos y aguantar los 8.600 puntos. Dentro del selectivo español, casi todos los valores han cotizado en negativo. Entre las caídas destacan la compañía siderúrgica ArcelorMittal, que se desploma casi un 6%, Acerinox y Fluidra, que pierden más de un 3%. En cambio, Telefónica, Melia Hotels y Caixabank, que este viernes ha presentado resultados, se apuntan unas suaves ganancias.
Tras vivir una semana difícil, Wall Street cambió de rumbo y pisó terreno positivo. A las 18.00, el Dow Jones y el S&P 500 subían casi un 1% y el Nasdaq un 2%. La preocupación por una política monetaria más estricta no eclipsó la buena marcha de las ventas de Apple, que logró una facturación récord de más de 110.000 millones entre octubre y diciembre.
Según Nieves Benito, Responsable de Fundamental Research de Santander AM, no ha habido grandes sorpresas en la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto, pero el mensaje de Powell sí se tornaba más agresivo. “El punto importante del discurso es el tiempo desde el fin de la recompra de activos hasta el principio de la reducción del balance, que va a ser más corto que en los ciclos previos de subidas (2015-2017). El pico de inflación derivado por los problemas de suministros se va resolviendo, pero el casi pleno empleo americano deja bastante evidencia de una inflación que va a continuar por encima del 2%”, apunta.
En España, el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha avanzado este viernes que la economía española creció un 5% en 2021, de modo que la economía aún no ha recuperado lo perdido durante la crisis del coronavirus por la persistencia del virus, que ha frenado el consumo y el turismo. La economía alemana, por su parte, ha reculado en el último trimestre al contraerse un 0,7%, como consecuencia de las restricciones más severas que impuso el país para luchar contra su cuarta ola de coronavirus y la prolongación de cuellos de botella y problemas de suministros. El dato contrasta con el rebote de Francia, del 7%, que, sin embargo, no ha animado el parqué de París.
En el foco de atención de los inversores permanecen, además, los riesgos geopolíticos vinculados al conflicto de Ucrania. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, considera que hay una “clara posibilidad” de que Rusia “pueda invadir el país en febrero”, según ha comunicado este jueves por teléfono a su homólogo ucranio, Volodímir Zelenski. Un conflicto entre las dos partes tendría consecuencias relevantes en el componente energético. Con la reanudación de la actividad, Europa se ha enfrentado en el último año con unos precios eléctricos particularmente inflados, también debido a los recortes del suministro ruso.