Cuando hace un mes, con la instauración del estado de alarma, la venta de coches cayó en picado a consecuencia de la crisis del coronavirus, las líneas de montaje de Seat en Cataluña comenzaron a cerrar. Sin embargo, y ante la falta de material sanitario necesario en los hospitales, la compañía decidió colaborar con medidas de urgencia y volver a abrir las puertas de su fábrica en Martorell (Barcelona) con un único objetivo: fabricar respiradores de emergencia para los hospitales utilizando algunos de los componentes fabricados en Seat y destinados a su uso en automóviles. "Cada dispositivo pasa un exhaustivo control de calidad, con esterilización de luz ultravioleta, y está autorizado por la Agencia Española del Medicamento para la investigación clínica", comenta Patricia Such, directora del departamento de Salud de Seat. La semana pasada la compañía llegó a producir hasta 300 respiradores diarios en la misma línea de montaje donde fabrica su modelo Seat León. Un ejemplo: entre las piezas más importantes (en total son unas 119) se encuentra el motor de un limpiaparabrisas, adaptado por ingenieros de la empresa y testado por especialistas del sector médico como motor del respirador. Ahora, la empresa está fabrica estos dispositivos según la demanda de los hospitales.
"El objetivo era fabricarlos con la máxima calidad y el resultado ha sido Oxygen, un respirador con hardware de código abierto [de uso libre para que cualquier persona o empresa pueda fabricarlo] y diseñado en colaboración con la empresa desarrolladora catalana Protofy.XYZ", añaden desde Seat. La fabricación de estos respiradores ha sido una carrera contrarreloj, con 150 trabajadores de diferentes áreas de trabajo de la fábrica sumados a la iniciativa. Algunos abandonaron su puesto habitual para ensamblar los respiradores. “Modificar una línea de montaje que fabrica un subchasis y transformarla para fabricar respiradores ha sido un trabajo arduo que tuvimos que hacer en una semana”, comenta Sergio Arreciado, trabajador del Área de Ingeniería de Procesos.
El Oxygen se basa en los respiradores que llevan las ambulancias, cuyo funcionamiento consiste en accionar automáticamente un ambú (aparato que funciona como bolsa autoinflable) para que proporcione respiración asistida a los pacientes. Cuenta con un mecanismo que permite adaptar diferentes ratios de inspiración y espiración según el ritmo de respiración de cada paciente. Tanto los materiales como los planos del respirador se encuentran en Internet para que cualquier empresa pueda unirse a esta iniciativa. En el caso de Seat, las piezas que utiliza para la chapa, los engranajes, las levas y algunos componentes producidos en 3D se hacen en las instalaciones que la automovilística tiene en Martorell (Seat Componentes y Seat Barcelona), mientras que los materiales eléctricos y electrónicos los fabrican otras compañías que trabajan de forma habitual con la marca.
Una vez fabricados es cuando entran en acción otros colaboradores del proyecto, en este caso para el reparto (gratuito) de los respiradores. Es el caso de Correos que, gracias a su capacidad logística para operar en todo el país, ha podido repartirlos por distintos puntos de España. La semana pasada ya entregó los primeros respiradores al Hospital de Germans Trias i Pujol (en Badalona). Esta es una de las más de 170 iniciativas con las que la empresa de paquetería está colaborando para combatir la crisis de la Covid-19 y en las que participan de manera voluntaria decenas de carteros durante su tiempo libre. Entre ellas destacan la del cocinero José Andrés Chefs for Spain y el reparto de unas 930.000 mascarillas entre más de 163.000 transportistas de todo el país.
13 prototipos hasta llegar al definitivo
El equipo de ingeniería de Seat cuenta que conocer de antemano las dificultades que iban a encontrarse les ha ayudado a superarlas con éxito, tales como saber cuáles son las funciones básicas de un respirador para mantener con vida a una persona y cómo obtenerlas con los recursos materiales que tenía Seat. Con esto desarrollaron varios prototipos, 13 en total, hasta dar con el dispositivo final. Tanto el diseño como la producción de los respiradores se ha realizado bajo la dirección médica de los doctores Manel Puig Domingo (del Institut d'Investigació Germans Trias i Pujol), Oriol Estrada (del hospital del mismo nombre) y Josep Maria Nicolás (del Hospital Clínic de Barcelona), que sometieron el dispositivo a tests de larga duración.
El objetivo, según Seat, es que los respiradores lleguen a todos aquellos hospitales donde sean necesarios. Para ello, cada Comunidad Autónoma realiza una solicitud a través del Ministerio de Sanidad, que priorizará las necesidades de cada hospital, o también a través de los hospitales Clínic y Germans Trias i Pujol. Seat contacta con estas instituciones médicas y coordina con Correos la entrega de los respiradores a nivel nacional.