Trabajo plantea ayudas de hasta 9.000 euros para las empresas que creen empleo

La reforma del real decreto por el que se regulan los programas comunes de activación para el empleo que planea aprobar el Gobierno de coalición contempla una serie de incentivos que pueden alcanzar los 9.000 euros, para las empresas y los trabajadores autónomos que fomenten la entrada al mercado laboral de aquellos grupos más vulnerables, como los jóvenes, las mujeres, los mayores de 45 años y los parados de larga duración. Trabajo y agentes sociales se reunieron el martes para su análisis en un encuentro que se extendió más de d...

La reforma del real decreto por el que se regulan los programas comunes de activación para el empleo que planea aprobar el Gobierno de coalición contempla una serie de incentivos que pueden alcanzar los 9.000 euros, para las empresas y los trabajadores autónomos que fomenten la entrada al mercado laboral de aquellos grupos más vulnerables, como los jóvenes, las mujeres, los mayores de 45 años y los parados de larga duración. Trabajo y agentes sociales se reunieron el martes para su análisis en un encuentro que se extendió más de dos horas. Según reconocieron tras su conclusión desde el ministerio que dirige Yolanda Díaz, la reunión resultó “muy positiva” y el trámite para su validación final sigue adelante.

Las líneas maestras del borrador, al que ha tenido acceso EL PAÍS, detallan una batería de medidas que tienen como punto de partida la unificación de distintas normativas en un mismo marco de mínimos que tendrá aplicación en todo el Estado, y que después las comunidades autónomas podrán adecuar atendiendo a las particularidades de su territorio. Se pretende con esta simplificación mejorar la seguridad jurídica y la calidad normativa en la regulación de las políticas activas de empleo —el conjunto de medidas para facilitar que los desempleados encuentren trabajo u orientarlos a la formación profesional—.

En el apartado en el que se detallan los distintos incentivos para impulsar estas nuevas medidas —que saldrán de lo establecido en los Presupuestos Generales del Estado y en los distintos créditos de los que se beneficiará el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE)—, se concreta, por ejemplo, que las contrataciones indefinidas iniciales podrán subvencionarse con 4.000 euros. Una cifra que puede ascender hasta los 7.000 si la persona contratada es mujer, mayor de 45 años o de cualquier otro colectivo vulnerable determinado por el SEPE. En el supuesto de que se tratase de la primera persona contratada por un trabajador autónomo el montante de la subvención ascendería en 2.000 euros.

La transformación en indefinidos de contratos temporales —entre los que se incluyen los formativos—, también recibirán una dotación económica de 4.000 euros, que será de 5.500 si se trata de personas trabajadoras con alguna discapacidad. Con la finalidad de garantizar un empleo de calidad para aquellos recién llegados al mercado laboral, como es el caso de los jóvenes, el borrador del real decreto —que este martes fue presentado formalmente a los agentes sociales en una reunión que se extendió más allá de las dos horas—, dicta que se les deberá realizar un contrato laboral adecuado a sus características (de prácticas, formación o el que represente más fielmente la actividad a desempeñar) cuando se encuentren inmersos en programas de formación y empleo que reciban aportación pública.

Otra de las medidas que pretende favorecer al colectivo de trabajadores jóvenes es la que hace referencia a las personas que abandonaron el país en busca de un empleo con mejores condiciones. Para facilitar su retorno, la revisión del real decreto recoge una serie de ayudas que abarca desde los gastos de desplazamiento a los que se verían obligadas estas personas, hasta la realización de contratos o la promulgación de distintos proyectos de emprendimiento. Si retornasen para firmar un contrato de trabajo por cuenta ajena su incorporación estaría subvencionada con 5.500 euros (cada contratación), y con 6.000 en el caso de que se tratase de una mujer, y entre 7.000 y 7.500 si lo aprueba el SEPE.

Conciliación laboral

Otro de los apartados sobre los que se centra esta reforma tiene que ver con garantizar la presencia del 50% de mujeres en los programas de mejora de la empleabilidad que estén financiados con los servicios públicos. La promoción del empleo para las mujeres es uno de los ejes sobre los que pivota la reforma, que busca continuar con las distintas políticas implementadas en los últimos años dirigidas a alcanzar igualdad de oportunidades para ambos géneros. La inserción laboral de aquellas mujeres que hayan sido víctima de la violencia de género también está contemplada en los distintos programas.

Dentro del capítulo que detalla los planes en materia de igualdad se establecen incentivos particulares en la contratación indefinida de mujeres y ayudas a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral. Unido al nuevo paradigma laboral sobrevenido por la covid-19, también se establecen subvenciones para aquellas personas trabajadoras —sean o no autónomas— que contraten a personas desempleadas para el cuidado de hijos menores de hasta tres años o de familiares en situación de dependencia o de enfermedad grave. En esta circunstancia estarían exentas las cotizaciones a la Seguridad Social. En cuanto a la contratación de parados de larga duración, y/o de personas mayores de 45 años, se establecen ayudas de 7.500 euros y 2.000 más si se trata del primer contratado por un autónomo.