Las Bolsas latinoamericanas se suman al rebote de Wall Street
Brasil, Argentina y México recuperan terreno tras la debacle del jueves
Después de un día de pérdidas históricas, el viernes promete ser uno de recuperación en América Latina. Los principales índices y divisas cerraron en verde, aupados por el rebote de Wall Street, que subió 9,4%.1.980 puntos por encima de su valor en la jornada negra del jueves. São Paulo lideró las subidas regionales con el 13,91%, después de un desplome de más del 14% en la víspera. México, la segunda economía latinoamericana, también ha registrado ganancias y h...
Después de un día de pérdidas históricas, el viernes promete ser uno de recuperación en América Latina. Los principales índices y divisas cerraron en verde, aupados por el rebote de Wall Street, que subió 9,4%.1.980 puntos por encima de su valor en la jornada negra del jueves. São Paulo lideró las subidas regionales con el 13,91%, después de un desplome de más del 14% en la víspera. México, la segunda economía latinoamericana, también ha registrado ganancias y ha cerrado con una subida de más del 3%. El índice Merval de Buenos Aires, sin embargo, tuvo poco para festejar: tras abrir con subida de un 3%, operó la mayor parte del día en rojo, hasta cerrar con un magro 0,34% positivo.
Minutos después de la apertura, el Ibovespa, principal índice del mercado brasileño, ya había registrado un alza de casi el 14%, hasta los 82.721 puntos. A media rueda cayó hasta cerca del cero, lastrado por el rumor de que había dado positivo el test de coronavirus del presidente Jair Bolsonaro. Bastó que Bolsonaro confirmase en redes el resultado negativo para que el índice recuperase el ímpetu inicial. En el mercado de divisas, el dólar frenó su apreciación frente al real. La moneda estadounidense arrancó el día cotizado a 4,70 reales, una bajada del 1,46%. La víspera, el dólar se había disparado y llegó a ser vendido a 5 reales, un récord histórico, pero cerró el día a 4,78 reales.
La Bolsa de Buenos Aires también arrancó en verde, con una subida inicial de más del 3%. Pero pronto perdió fuelle y apenas logró superar el cero. Los inversores golpean con especial fuerza a Argentina, que el jueves sufrió una caída del 9,76%. El riesgo país, que mide el diferencial que los bonos de deuda argentinos pagan contra sus equivalentes de Estados Unidos, superó los 3.000 puntos, una cifra que refleja la complejidad que atraviesa el país sudamericano en su negociación de su deuda externa. La cotización del peso no llega a reflejar la gravedad de la crisis porque no flota libremente. El Gobierno aplica restricciones cambiarias que han logrado mantener la divisa en torno a los 64 pesos por cada dólar, pero la cotización de la divisa se ha escapado en el mercado negro hasta los 83 pesos durante el jueves.
El Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores ha recuperado terreno después de que el jueves registrara caídas de más del 8%, la peor cifra desde septiembre de 1998. En cuanto al peso, que en la madrugada del jueves alcanzó su mínimo histórico, su cotización se ha depreciado un 1.5% y se ha situado en casi 22 unidades el dólar. Con todo, la moneda mexicana acumula una depreciación de más del 9% en la semana, su mayor caída desde noviembre de 2016 tras la victoria de Donald Trump. La Secretaría de Hacienda ha intercambiado este viernes bonos gubernamentales por valor de 36.520 millones de pesos con plazos mayores a 2 años por otros títulos de un año para mitigar los efectos de la presión cambiaria.
El respiro de las bolsas mundiales ha contagiado también al peso chileno, que tuvo este jueves un mínimo histórico con respecto del dólar. La Bolsa de Comercio de Santiago de Chile ha abierto sus operaciones en 836,45 pesos por billete verde, lo que representa una baja de 17 pesos con respecto al precio de ayer, cuando llegó a 853,70. El IPSA -el indicador que reúne a las principales acciones locales- ha subido un 0,96% y Latam Airlines, que ayer tuvo su peor jornada desde 1995, comienza a recuperar parte de lo perdido en las últimas horas. Dado el desplome de los mercados, el Banco Central de Chile anunció una serie de medidas con el objetivo de apoyar la liquidez.
En Colombia, en tanto, el peso ha recuperado algo del terreno perdido frente al dólar. La moneda nacional, que se ha convertido en una de las más devaluadas del mundo en marzo, se cambiaba este viernes a 3.920 pesos por cada dólar, después de que la víspera había superado por primera vez el umbral de los 4.000 pesos, informa Santiago Torrado desde Bogotá.
El rebote es la respuesta al jueves negro, una de las peores jornadas bursátiles de la historia. Wall Street registró las mayores pérdidas desde el crack de 1987, con bajadas del 10%. y la Bolsa española se derrumbó ayer un 14%, su mayor hundimiento de la historia. Este viernes, en cambio, Wall Street recuperó un 9,4%; el Ibex español, un 3,73%; y Milán, un 1,93%. No le ha ido bien a Asia, que registró caídas generalizadas a la rastra de la jornada del jueves. El Nikkei japonés acabó con un derrumbe del 6,08% tras haber alcanzado, por momento, bajadas de dos dígitos. En Shanghái la caída ha sido del 1,23%.
Habrá que esperar ahora para conocer el alcance del rebote latinoamericano. Brasil atraviesa un momento crítico por el derrumbe de su moneda y las caídas previsibles de sus principales mercados de exportación, golpeados por el coronavirus. Entretanto, la fragilidad de la economía mexicana, lastrada por el nulo crecimiento, puede verse agravada por la caída del precio del crudo y sus previsibles efectos sobre Pemex, la petrolera más endeudada del mundo cuya calificación crediticia tiene una perspectiva negativa.
Argentina, por su parte, carga con el lastre de la negociación de su deuda externa con acreedores privados y el FMI, a quienes pide una quita de capital y un nuevo calendario de cobro de intereses. El país sudamericano necesita crecer para que los acreedores crean en la viabilidad de un nuevo plan de pagos, pero el escenario actual es el peor posible para sus aspiraciones. Sus dos principales clientes internacionales son Brasil y China. El primero atraviesa su propia crisis y China ha ralentizado sus compras de soja, el principal producto argentino de exportación, debido a la crisis derivada del coronavirus. La consultora Abeceb estimó en un informe reciente que los ingresos por exportaciones argentinas caerán este año un 5%, hasta 3.400 millones de dólares. La actividad económica, en tanto, puede caer hasta 1,5%, el tercer dato negativo consecutivo.