La Airef cree que los gastos del plan de estabilidad están infravalorados

El organismo público detecta “inconsistencias” en las proyecciones macroeconómicas y fiscales

El presidente de la AIREF, José Luis EscriváEFE

El nuevo calendario establecido por el Gobierno interino para reducir el déficit público por debajo del 3% el próximo año y en el 1,6% del PIB en 2019 es "exigente pero factible siempre y cuando se ejecuten con el máximo rigor las medidas anunciadas por el Gobierno —contención de gastos— y se garantice que cada una de las Administraciones Públicas aplica las medidas automáticas de prevención establecidas en la Ley de Estabilidad Presupuestaria". Es la conclusión que la ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El nuevo calendario establecido por el Gobierno interino para reducir el déficit público por debajo del 3% el próximo año y en el 1,6% del PIB en 2019 es "exigente pero factible siempre y cuando se ejecuten con el máximo rigor las medidas anunciadas por el Gobierno —contención de gastos— y se garantice que cada una de las Administraciones Públicas aplica las medidas automáticas de prevención establecidas en la Ley de Estabilidad Presupuestaria". Es la conclusión que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) extrae tras revisar a fondo el programa de estabilidad 2016-2019 aprobado por el Gobierno a finales de abril y en el que muestra el camino que seguirá para reducir los números rojos de las Administraciones por debajo del 3% del PIB.

Más información

Aunque el organismo encargado de velar por la sostenibilidad de las cuentas públicas considera que las previsiones de crecimiento son "probables" advierte de que tanto los gastos como los ingresos públicos proyectados parecen estar sobrevalorados. "A partir de 2017, las proyecciones de ingresos fiscales pueden considerarse conservadoras, mientras que la senda de gasto, en un escenario sin medidas adicionales, parece demasiado optimista", concluye la Autoridad Fiscal en el informe difundido este jueves.

El Ejecutivo interino del PP planea una reducción paulatina del gasto público desde el 43,3% del PIB del año pasado al 40,1% en 2019. Esta disminución del peso de los gastos se debe sobre todo a la reducción del gasto por intereses de la deuda, las transferencias sociales en especie —menores prestaciones por desempleo como consecuencia de la mejora del mercado laboral— así como un menor consumo público e inversión. No obstante, la mayor caída se producirá porque las cifras oficiales prevén un aumento del PIB superior a los gastos, lo que provoca que el cociente entre ambas magnitudes disminuya.

La institución considera que es "poco probable" la contención del gasto en sanidad y educación en términos de PIB, que en el plan del Gobierno presenta una reducción constante en el periodo 2016-2019, a tenor de las perspectivas demográficas, con un acelerado envejecimiento de la población.

Más recaudación

La Airef también considera que los ingresos están infravalorados. Sostiene que la recaudación, sobre todo la procedente de los impuestos indirectos (IVA e impuestos especiales) avanza más rápido que el PIB cuando los vientos soplan a favor y el Gobierno ha sido prudente en sus cálculos. Explica que una vez superados los efectos de la rebaja fiscal de 2015 y 2016 del IRPF y sociedades, estos tributos deben registrar más rendimientos y la mejora de las condiciones económicas deben impulsar el IVA por la fortaleza del consumo privado y la recuperación del sector inmobiliario.

La Autoridad Fiscal pone el foco especialmente en la dificultad de las comunidades para ajustar sus cuentas y propone objetivos individuales de corrección del déficit. Además, advierte sobre el persistente agujero en las cuentas de la Seguridad Social e insta a reformar sus fuentes de financiación en el ámbito del Pacto de Toledo.

Sobre la firma

Archivado En