Premio a los mileuristas de la escena

'La función por hacer', una obra que empezó a representarse en el vestíbulo de un teatro, arrasa en una gala de los Max marcada por las reivindicaciones

La función por hacer, un espectáculo humilde basado en Seis personajes en busca de autor de Luigi Pirandello, que empezó su recorrido ni siquiera en el escenario de un teatro, sino en el hall de un pequeño teatro como es el Lara de Madrid, fue la gran protagonista de la noche de los Premios Max de las Artes Escénicas. Optaba a nueve estatuillas, esa conocida manzana de bronce diseñada por el poeta visual Joan Brossa, y se hizo con siete: las de mejor dirección, espectáculo, adaptación, actor y actriz de reparto, diseño de luz, y mejor empresario. La alegría de su d...

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La función por hacer, un espectáculo humilde basado en Seis personajes en busca de autor de Luigi Pirandello, que empezó su recorrido ni siquiera en el escenario de un teatro, sino en el hall de un pequeño teatro como es el Lara de Madrid, fue la gran protagonista de la noche de los Premios Max de las Artes Escénicas. Optaba a nueve estatuillas, esa conocida manzana de bronce diseñada por el poeta visual Joan Brossa, y se hizo con siete: las de mejor dirección, espectáculo, adaptación, actor y actriz de reparto, diseño de luz, y mejor empresario. La alegría de su director, Miguel del Arco, era patente. Como la del público, que aplaudió calurosamente esos galardones dados a profesionales sobrados de talento y muy pocos medios. "La situación es catastrófica por culpa de los Ayuntamientos que no pagan, somos mileuristas a pesar del éxito que tenemos con todo lo que hacemos, no hay una compañía ni un solo productor al que no se le debe dinero", señaló el director al finalizar la gala.

Otros profesionales que también se hicieron con su manzana fueron José Monleón, Laura Kumin, Carlos Hipólito, Luis Jiménez, Elisa Sanz, Manuela Paso, Raúl Prieto, Vicky Peña, Sol Picó, Quico Cadaval, Víctor Ullate, Ara Malikian, Andrea D'Odorico, Israel Galván, Alfredo Sanzol y Francisco Nieva.

El Gran Teatro de Córdoba acogió anoche la gala (retransmitida por La 2 de TVE y por su Canal Internacional), organizada por la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) y su Fundación Autor. Este año tuvo como autor y director a Juan Carlos Rubio, quien contó con Natalia Millán, Fernando Tejero, Toni Cantó, Ángel Ruiz y Chema Noci para participar en un espectáculo equilibrado y bien planteado, mejor que otros años, que trufó canciones, humor, situaciones divertidas y números musicales.

La noche también acogió variadas reivindicaciones. Incluso por parte de algunos manifestantes que acudieron a la puerta del teatro cordobés, como los funcionarios de la Junta de Andalucía que luchan contra el decreto de la reordenación del sector público. Miguel del Arco afeó a los Ayuntamientos que no pagan: "Estáis acabando con el teatro". La escenógrafa y figurinista Elisa Sanz pidió que se revise la actual ley de propiedad intelectual para que escenógrafos, figurinistas e iluminadores tengan los mismos derechos que tienen músicos, autores de texto y coreógrafos.

Las reivindicaciones fueron acogidas con aplausos por un público repleto de gente del oficio y políticos Ángeles González-Sinde, ministra de Cultura; Carmen Calvo, una de sus predecesoras en el cargo; Andrés Ocaña, alcalde de Córdoba, y la plana mayor de la SGAE, capitaneada por su presidente ejecutivo, Eduardo Bautista. González-Sinde entregó el Premio Max de Honor al crítico y hombre de teatro José Monleón, quien lleva 60 años entregado a las tablas. Recordó que las gentes del teatro "somos personas muy necesitadas de amor y los actores más que el éxito, necesitan que alguien les entienda y les quiera y esto es un acto de amor a la profesión que yo agradezco de corazón". Monleón alargó su intervención más de lo que esperaba la organización y su propia hija, Ángela, le señaló la necesidad de "ir terminando". A lo que él contestó: "Yo de aquí no me voy hasta que termine", lo que fue muy aplaudido por el público.

En el anecdotario quedan cosas como el poner en masculino la profesión de muchas autoras, compositoras y actrices cuyos nombres salieron en pantalla al recordar a los compañeros desaparecidos en el último año. Y una obviedad: las votaciones para espectáculos escénicos tienen un difícil y casi irresoluble solución. Son montajes que no todos los votantes pueden ver, en contra de lo que pasa en cine, y lo peor es que puede terminar triunfando una compañía porque sea numerosa o tenga muchos amigos. Ha ocurrido en esta edición con Blancanieves Boulevard, espectáculo mal valorado, pero que era candidato a 11 Max y que, para alivio de muchos, no se hizo con ninguno de ellos. Pero podía haber ocurrido lo contrario.

Miguel del Arco recoge la manzana al mejor espectáculo de teatro en los Premios Max.JULIÁN ROJAS

Los mejores

- Premio Max de Honor a José Monleón

- Espectáculo de teatro: La función por hacer

- Espectáculo de danza: Wonderland

- Espectáculo de teatro musical: Pegados

- Espectáculo de teatro infantil: Nubes

- Director de escena: Miguel del Arco

- Actriz protagonista: Vicky Peña

- Actor protagonista: Carlos Hipólito

- Intérprete femenina de danza: Sol Picó

- Intérprete masculino de danza: Israel Galván

- Coreografía: Sol Picó

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