Bilbao recurre por primera vez al endeudamiento con Azkuna de alcalde

El Ayuntamiento de Bilbao se endeudará por primera vez desde que Iñaki Azkuna es alcalde. La última vez que el Consistorio tuvo que recurrir a un préstamo fue en 1997, cuando lo gobernaba Josu Ortuondo. En aquella ocasión la corporación pidió al BBVA 14,5 millones de euros. Ahora precisará 22,8 para sacar adelante los grandes proyectos que hay en marcha en la capital vizcaína. Los más importantes son el centro cultural y de ocio de la Alhóndiga, la remodelación del Teatro Campos -cuya inauguración está prevista para principios de 2010- y el Palacio de Deportes de Miribilla.

El proyecto ...

El Ayuntamiento de Bilbao se endeudará por primera vez desde que Iñaki Azkuna es alcalde. La última vez que el Consistorio tuvo que recurrir a un préstamo fue en 1997, cuando lo gobernaba Josu Ortuondo. En aquella ocasión la corporación pidió al BBVA 14,5 millones de euros. Ahora precisará 22,8 para sacar adelante los grandes proyectos que hay en marcha en la capital vizcaína. Los más importantes son el centro cultural y de ocio de la Alhóndiga, la remodelación del Teatro Campos -cuya inauguración está prevista para principios de 2010- y el Palacio de Deportes de Miribilla.

El proyecto de presupuesto del equipo de gobierno para 2010 asciende a 500,1 millones de euros -el consolidado roza los 563 millones, al contemplar las cuentas de los organismos autónomos locales y las de las sociedades municipales, un 6,74% inferior al aprobado para este año. Se retrocede así a una cifra próxima a la aprobada en 2007.

Además del "moderado" endeudamiento, que, según Azkuna, permitirá al Ayuntamiento "coger aire", el presupuesto municipal viene marcado por un fuerte descenso de las previsiones de recaudación fiscal y la devolución trianual de 27,6 millones al fondo foral Udalkutxa.

Además de las tres grandes obras proyectadas, el Ayuntamiento dará continuidad a la regeneración de los barrios, la construcción del segundo parque de bomberos y la finalización de la remodelación de los parques de Rekalde y Otxarkoaga. Además, seguirá desarrollando el plan urbanístico de Zorrozaurre.

Para adecuarse a la importante reducción de ingresos, el Ayuntamiento contempla la congelación de los impuestos y tasas municipales, una reducción general del 5% en el gasto corriente y la contención de los gastos de personal. El Ejecutivo local también prevé reducir las inversiones en los distritos -de 1,8 a 1,5 millones de euros, retrasará la incorporación de 40 nuevos policías municipales, suprimirá el akelarre de Artxanda, reducirá las jornadas de Carnavales, suprimirá programas como el Día Europeo de la Música, Bidebarrieta Científica y Cibercomic y recortará "drásticamente" el número de impresiones de Bilbao en cifras. El próximo 24 de noviembre las cuentas se llevarán a pleno para su aprobación.