ADN en un guante permite esclarecer un crimen de 2007
Unos restos de ADN hallados en el guante del supuesto homicida han permitido esclarecer un crimen cometido en diciembre de 2007. El perfil genético del presunto autor fue recogido después de que éste muriera tiroteado en agosto de 2008 en un descampado frente a la calle de San Marino, en el distrito de San Blas, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
El primer homicidio que se produjo fue el del colombiano James Bermúdez Ramírez, de 45 años. Murió acribillado por tres balazos en el pecho y otro en la cabeza cuando caminaba por la calle de Algaba, próxima a la de N...
Unos restos de ADN hallados en el guante del supuesto homicida han permitido esclarecer un crimen cometido en diciembre de 2007. El perfil genético del presunto autor fue recogido después de que éste muriera tiroteado en agosto de 2008 en un descampado frente a la calle de San Marino, en el distrito de San Blas, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
El primer homicidio que se produjo fue el del colombiano James Bermúdez Ramírez, de 45 años. Murió acribillado por tres balazos en el pecho y otro en la cabeza cuando caminaba por la calle de Algaba, próxima a la de Nuestra Señora de Valvanera, en Carabanchel.
Tres personas se bajaron de un coche y sin mediar palabra se acercaron a la víctima. Dos de ellos iban armados y comenzaron a disparar a Bermúdez. El cuarto y último tiro se lo descerrajaron en la cabeza, cuando ya estaba en el suelo. Después huyeron andando a gran velocidad por las calles adyacentes.
La policía encontró siete casquillos junto al cadáver. En el lugar, los agentes de Homicidios encontraron también un guante que, supuestamente, había sido utilizado por uno de los asesinos.
El guante fue remitido a los laboratorios de la Comisaría General de la Policía Científica, donde fue analizado. Varios meses después, los especialistas emitieron un informe pericial en el que afirmaron que el guante pertenecía a un varón, que no constaba en las bases de datos.
Tiro en la sien
Pero el enigma se resolvió con un nuevo crimen ocurrido hace casi un año, el 2 de agosto de 2008. Una patrulla de la policía encontró a un hombre tirado en el suelo, en la calle de San Marino (San Blas). Había recibido un tiro mortal en la sien. Estaba inmóvil e inconsciente. Los servicios sanitarios del Samur le trasladaron al hospital Gregorio Marañón, donde murió a las pocas horas. La víctima fue identificada como Harold Hernán Durán Ramírez, de unos 35 años.
El forense tomó muestras de sangre durante la autopsia que fueron remitidas a la Comisaría General de la Policía Científica para analizar e identificar el perfil genético de la víctima. Fue cotejado con las bases policiales de ADN. El perfil coincidía con los restos hallados en el guante hallado junto al cadáver de James Bermúdez, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid.