Cuatro acusadas por aplicar a un enfermo una quimioterapia 10 veces mayor

Manuel Olmos, de 32 años, se sometió a un tratamiento de quimioterapia para intentar vencer un cáncer de páncreas y encontró la muerte porque le aplicaron en un solo día diez veces la dosis establecida. Fue en el hospital Clínico de Valencia. Las cuatro sanitarias que el fiscal considera que participaron de un homicidio por negligencia serán juzgadas la próxima semana. El ministerio público pide para ellas dos años de cárcel y cuatro de inhabilitación para el ejercicio de su profesión. Además, les solicita 150.000 euros para la viuda, y 15.000 para la madre del fallecido. A la Consejería de Sa...

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Manuel Olmos, de 32 años, se sometió a un tratamiento de quimioterapia para intentar vencer un cáncer de páncreas y encontró la muerte porque le aplicaron en un solo día diez veces la dosis establecida. Fue en el hospital Clínico de Valencia. Las cuatro sanitarias que el fiscal considera que participaron de un homicidio por negligencia serán juzgadas la próxima semana. El ministerio público pide para ellas dos años de cárcel y cuatro de inhabilitación para el ejercicio de su profesión. Además, les solicita 150.000 euros para la viuda, y 15.000 para la madre del fallecido. A la Consejería de Sanidad la considera responsable civil subsidiaria.

A Manuel Olmos se le administraron dos de los tres ciclos de quimioterapia con normalidad, según el escrito fiscal. El 12 de septiembre de 2005 se inició el tercero. La farmacéutica residente, teniendo conocimiento de que la dosis pautada por el oncólogo era de 900 miligramos al día, "no se preocupó de comprobar la cantidad de fármaco que contenía cada vial y ordenó que prepararan el gotero con nueve viales al día, creyendo que cada uno era de 100 miligramos". Desconocía que eran de un gramo. No obstante, en la hoja de cálculo puso la cantidad total a administrar, la misma fijada por el oncólogo. La auxiliar que debía preparar el medicamento "solo se fijó, aún teniendo delante la hoja de elaboración del medicamento, en el número de viales" y entregó nueve de un gramo. Dos enfermeras, también con la hoja delante, "sin molestarse en comprobar la cantidad que cada vial contenía", lo administraron. El 3 de octubre, el paciente murió a consecuencia de la sobredosis de tóxicos.

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