Vitoria fracasa en la negociación sobre el contrato del mobiliario urbano

El Ayuntamiento de Vitoria no ha logrado llegar a un acuerdo con la empresa Elmusa (El Mobiliario Urbano, SA) en torno a las marquesinas y otros equipamientos ciudadanos de Vitoria y tendrá que cumplir la sentencia del Tribunal Supremo que le obliga a rectificar en la adjudicación de mobiliario urbano a otra empresa, Cemusa. Así lo asumió ayer el alcalde de la ciudad, Patxi Lazcoz, quien pedirá el cumplimiento literal de la sentencia, lo que le llevará a rescindir el contrato Cemusa para que Elmusa ocupe su lugar.

Fuentes municipales esperan que Elmusa asuma la adquisición del mobiliari...

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El Ayuntamiento de Vitoria no ha logrado llegar a un acuerdo con la empresa Elmusa (El Mobiliario Urbano, SA) en torno a las marquesinas y otros equipamientos ciudadanos de Vitoria y tendrá que cumplir la sentencia del Tribunal Supremo que le obliga a rectificar en la adjudicación de mobiliario urbano a otra empresa, Cemusa. Así lo asumió ayer el alcalde de la ciudad, Patxi Lazcoz, quien pedirá el cumplimiento literal de la sentencia, lo que le llevará a rescindir el contrato Cemusa para que Elmusa ocupe su lugar.

Fuentes municipales esperan que Elmusa asuma la adquisición del mobiliario de Cemusa, que no puede recurrir la sentencia, ante el alto coste y el poco tiempo que tiene si quiere colocar sus propias marquesinas.

El asunto se remonta a 2001, cuando el PSE rectificó su apoyo a un pliego de condiciones impulsado por el entonces equipo de gobierno popular para la contratación de mobiliario urbano. En el último momento, el PSE entendió con el resto de la oposición (PNV-EA, EH y EB), que las bases del concurso perjudicaban el interés público. Tras repetirse la licitación, Cemusa resultó vencedora y Elmusa recurrió la decisión del pleno municipal.

Tras el fallo del Supremo, Lazcoz abrió una negociación con Elmusa con el fin de llegar a un acuerdo económico por los perjuicios sufridos, que esta empresa situaba en unos 30 millones. Al final, se ha llegado al final del plazo para ejecutar la sentencia sin conseguirse ese arreglo. El alcalde se encuentra además inmerso en un proceso judicial por este asunto tras la querella por prevaricación presentada contra él por el portavoz municipal del PP, Javier Maroto, querella que el juzgado correspondiente ha admitido a trámite.

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