Innovadores a la caza de subvenciones

La Galicia con más ansias de innovación se concentró ayer en el Palacio de Congresos de Santiago. Empresarios, emprendedores e investigadores de todos los rincones de la comunidad autónoma acudieron a la convocatoria de la Consellería de Innovación e Industria para asistir a una jornada informativa sobre las ayudas para proyectos de I+D+i de este año. La jornada comenzó con los típicos discursos políticos sobre las bondades de la inversión en este sector fundamental para la economía gallega, pero el momento de la verdad llegó un poco más tarde cuando se celebraron sesiones con grupos reducidos...

La Galicia con más ansias de innovación se concentró ayer en el Palacio de Congresos de Santiago. Empresarios, emprendedores e investigadores de todos los rincones de la comunidad autónoma acudieron a la convocatoria de la Consellería de Innovación e Industria para asistir a una jornada informativa sobre las ayudas para proyectos de I+D+i de este año. La jornada comenzó con los típicos discursos políticos sobre las bondades de la inversión en este sector fundamental para la economía gallega, pero el momento de la verdad llegó un poco más tarde cuando se celebraron sesiones con grupos reducidos para ofrecerles una información más completa sobre todas las líneas de ayuda para innovar a las que podrán acceder las empresas gallegas durante este año. La mayoría salieron convencidos de que podrán obtener financiación para el proyecto que su empresa quiere poner en marcha.

La Xunta está muy interesada en que las empresas se impliquen en la I+D

"Ahora hay que competir en innovación más que en costes"

La fauna empresarial que se reunió ayer en Santiago era de lo más diversa. Junto a los directivos encorbatados, que responden más a la imagen clásica de los responsables de las empresas, se sentaban jóvenes que dan sus primeros pasos en este mundo. El mismo objetivo une a ambos tipos de empresarios. Su objetivo es poder acceder a unas ayudas que este año se elevan hasta los 110 millones de euros y que en 2005 sólo alcanzaban los 47,5 millones.

Un grupo de directivos de la empresa viguesa Gráficas del Noroeste que aguardaban su turno para una de las sesiones informativas se mostraba muy sorprendido por la gran afluencia de empresarios a estas jornadas. Aunque prefieren no dar sus nombres, explican que los proyectos de I+D son imprescindibles para avanzar en su sector ya que exportan un tercio de su producción y tienen que cumplir los exigentes controles de calidad que reclaman sus clientes alemanes o franceses.

Uno de los directivos señala que la empresa ya ha obtenido ayudas para proyectos de I+D en otros ejercicios y ahora aspiran a conseguir subvenciones tanto en la línea de patentes como en el apartado de innovación tecnológica. En su opinión, el volumen actual de ayudas en I+D+i es muy importante y se percibe que la Administración gallega está muy interesada en que las empresas se impliquen en proyectos de esta tipo.

Desde una perspectiva diferente Concepción Dacal, secretaria técnica de la plataforma tecnológica Petegal, apunta que también espera conseguir ayudas para poner en marcha un proyecto que lleva ya funcionando dos años y en el que se integran más de un centenar de empresas del sector agroalimentario. En su opinión, las empresas son las más beneficiadas a la hora de conseguir ayudas para proyectos de I+D+i, aunque también las pueden obtener iniciativas como las plataformas tecnológicas, que están siendo alentadas desde la propia Consellería de Innovación.

Otro directivo que se identifica como representante de la empresa Applus, dedicada a la certificación de calidad, explica que las ayudas pueden resultar decisivas a la hora de afrontar proyectos de I+D+i aunque aquellos que se consideran estratégicos se llevarán a cabo incluso sin subvenciones. A su juicio las ayudas nunca son suficientes pero el hecho de que su cuantía aumente cada año permite a las empresas afrontar con garantías nuevas iniciativas. Prefiere no comentar nada sobre los proyectos de I+D que prepara su empresa porque en el sector donde trabaja no pueden darse demasiadas pistas a la competencia.

Julio Sande, gerente de la empresa Clarke, Modet & Cº que se dedica a gestionar patentes industriales, es un habitual de este tipo de convocatorias. La Xunta concede ayudas a fondo perdido que pueden alcanzar el 70% de los costes que supone solicitar una patente o marca. "En otras comunidades las ayudas son bastante inferiores pero aún nos queda mucho camino por recorrer", indica.

Sande apunta que la inversión en I+D se ha convertido en un factor estratégico para las empresas gallegas ya que "la época en la que se podía competir por costes se ha acabado por la irrupción de los países del Este y de China". "Ahora donde podemos competir es en innovación y por eso vienen muy bien este tipo de ayudas", dice. A su juicio, actualmente la información sobre las ayudas es más que suficiente y quien no las solicita es porque no les interesa, no por falta de datos sobre ellas. De todas formas, "hoy en día el que no innova, muere", sentencia.

Emilio Martínez, jefe del área de Innovación de la consultora Serviguide, señala que las empresas son ahora más profesionales que hace unos años a la hora de solicitar las ayudas. "Sabemos que para obtener una subvención el proyecto tiene que ser muy bueno y por eso cada vez nos esmeramos más", indica Martínez. Ahora la innovación es un concepto cotidiano y la Administración se esfuerza en promoverla. Galicia sigue detrás de la media estatal en cuanto a inversión en este apartado, pero los 1.900 millones de recursos públicos que se destinarán a I+D+i entre 2006 y 2010 deben reducir la brecha.