Carod dice que las nóminas sólo suponen el 7% de las ayudas a la cooperación

El consejero de la Vicepresidencia, Josep Lluís Carod Rovira, aseguró ayer que los gastos administrativos, entre ellos el dedicado a pagar al personal, suponen entre el 7% y el 10% del total de las ayudas que la Generalitat destina a países en vías de desarrollo y que incluso este porcentaje podría reducirse a final de año. Así lo informó en su comparecencia parlamentaria para explicar el Plan Anual de Cooperación de 2007.

Carod desmintió que el coste de las nóminas de los trabajadores signifiquen hasta el 20% de las inversiones en cooperación, como sucede en países como Bolivia o Gua...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El consejero de la Vicepresidencia, Josep Lluís Carod Rovira, aseguró ayer que los gastos administrativos, entre ellos el dedicado a pagar al personal, suponen entre el 7% y el 10% del total de las ayudas que la Generalitat destina a países en vías de desarrollo y que incluso este porcentaje podría reducirse a final de año. Así lo informó en su comparecencia parlamentaria para explicar el Plan Anual de Cooperación de 2007.

Carod desmintió que el coste de las nóminas de los trabajadores signifiquen hasta el 20% de las inversiones en cooperación, como sucede en países como Bolivia o Guatemala [véase EL PAÍS de ayer]. Carod repitió que el porcentaje no alcanza el 10%, pero obvió que este dato no incluye todavía el sueldo de los 11 delegados que la Generalitat piensa enviar a estos países y que percibirán una retribución de 44.000 euros. A ello habría que sumar los viajes, dietas, seguros y Seguridad Social, según diversos expertos en cooperación internacional, como Ignasi Carreras, ex director de Intermón-Oxfam. En total, cerca de 100.000 euros anuales.

La diputada de Convergència i Unió, Anna Figueras, criticó el incremento "exacerbado" del capítulo de personal en los presupuestos de cooperación en vez de "revertir en ayudas finalistas" al desarrollo. El socialista Antoni Comín defendió la contratación de personal desplazado porque, dijo, "la calidad de la cooperación requiere también una estructura organizativa de calidad". La republicana Anna Simó lamentó que EL PAÍS, en su edición de ayer, hubiera "malinterpretado una anécdota" y precisó que el gasto ejecutado en personal no alcanza el 5,5%.

La mayor parte de las críticas se las llevó Josep Lluís Carod Rovira por haber acudido un 13 de diciembre al Parlament para explicar sus planes sobre cooperación para el presente año.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En