La cámara de comercio lamenta la "falta de concreción" del presidente del Gobierno

Faltó concreción. Las palabras del presidente del Gobierno en relación a los retos económicos de Cataluña, a las nuevas infraestructuras y, en particular, al futuro del aeropuerto de El Prat supieron a poco entre el empresariado reunido en Sitges. El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, encontró "falta de concreción" sobre los planes del Gobierno para el futuro del aeropuerto de El Prat en el discurso de clausura del presidente del Gobierno.

La mayor parte de preguntas al presidente estuvieron relacionadas con el futuro del aeródromo barcelonés, pero José Luis...

Faltó concreción. Las palabras del presidente del Gobierno en relación a los retos económicos de Cataluña, a las nuevas infraestructuras y, en particular, al futuro del aeropuerto de El Prat supieron a poco entre el empresariado reunido en Sitges. El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, encontró "falta de concreción" sobre los planes del Gobierno para el futuro del aeropuerto de El Prat en el discurso de clausura del presidente del Gobierno.

La mayor parte de preguntas al presidente estuvieron relacionadas con el futuro del aeródromo barcelonés, pero José Luis Rodríguez Zapatero se resistió a dar nuevos detalles. El tono triunfalista del discurso del presidente también fue considerado algo excesivo por parte de algunos empresarios consultados por EL PAÍS. "No habría venido mal un poco de autocrítica o al menos explicar los claroscuros a los que también nos enfrentamos", explicó uno de ellos. Otros se mostraron más condescendientes: "el presidente ha dicho lo que tenía que decir".

En cualquier caso, la mayor parte de los consultados se mostraron satisfechos por el simple hecho de que unas jornadas económicas hayan logrado reunir al presidente del Gobierno y al de la oposición en un momento político marcado por el ruido ensordecedor y la crispación.

Los empresarios también han agradecido el tono moderado de todos los ponentes. El año pasado no fue así. El debate del Estatuto, el boicoteo que afectaba a algunas compañías catalanas y los baches del Gobierno de Pasqual Maragall propiciaron que el debate estuviera más enrarecido.

El presidente de Caixa Catalunya, Narcís Serra, hizo su particular balance a Europa Press: "quien quiera tener una visión panorámica de cómo están las cosas actualmente en el mundo, en Sitges ha podido escuchar muy buenas ideas".