El ADN confirma que el cadáver hallado en Toledo es del empresario desaparecido en Pinto
La prueba de ADN ha confirmado que el cadáver hallado el pasado domingo 15 de diciembre en una zona próxima a un arroyo, en el municipio toledano de Yuncos, pertenece al empresario y vecino de Pinto Javier Parla García, de 36 años. Así lo comunicaron ayer fuentes del caso que han destacado la importancia de esta prueba para llegar al convencimiento del 100% de la identidad del fallecido.
El resultado de las pruebas de ADN fue comunicado a la autoridad judicial el pasado martes, después de que el laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil obtuviera el resultado definitivo. El padr...
La prueba de ADN ha confirmado que el cadáver hallado el pasado domingo 15 de diciembre en una zona próxima a un arroyo, en el municipio toledano de Yuncos, pertenece al empresario y vecino de Pinto Javier Parla García, de 36 años. Así lo comunicaron ayer fuentes del caso que han destacado la importancia de esta prueba para llegar al convencimiento del 100% de la identidad del fallecido.
El resultado de las pruebas de ADN fue comunicado a la autoridad judicial el pasado martes, después de que el laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil obtuviera el resultado definitivo. El padre del fallecido se trasladó el mismo día del hallazgo del cadáver al puesto del instituto armado en Illescas (Toledo), donde se le extrajeron muestras de saliva para tener una muestra con la que cotejar el ADN del cuerpo.
Las pruebas fueron remitidas a los laboratorios centrales de la Guardia Civil, donde fueron analizadas. Esta prueba sólo viene a corroborar las sospechas que tenían los investigadores y la familia sobre la identidad del empresario. El cuerpo llevaba puestos el reloj y la alianza de Javier Parla. Además, cerca del lugar donde estaba el cadáver fue hallado un zapato de la víctima.
El cuerpo fue encontrado gracias a unos perros galgos cuyos dueños estaban de caza en un paraje cercano a un arroyo, a unos dos kilómetros del centro urbano de Yuncos. Había sido metido dentro de unas zarzas y allí le prendieron fuego. La Guardia Civil ha recogido muestras del combustible para su análisis. Además, los asesinos le habían colocado varios tablones encima para que no fuera descubierto fácilmente.
La prueba de ADN no ha retrasado el entierro del empresario. La familia pudo hacerse cargo del cadáver el pasado jueves y la inhumación tuvo lugar el pasado viernes, 22 de diciembre, en el cementerio de Pinto. Fuentes del caso han señalado que la instrucción de la desaparición del empresario de Pinto la llevaba hasta la fecha un juzgado de guardia de Parla. Al ser hallado muerto de dos tiros por la espalda y calcinado, el caso pasará en los próximos días al juzgado de Illescas.