"No creo que tirar un cohete se pueda considerar violencia"

El colectivo okupa, de fuerte arraigo en Barcelona y su área metropolitana, se expresa con ambigüedad respecto a los episodios de violencia que se repiten en la ciudad. Ivan, del barrio de Sants, rechaza que exista un grupo de jóvenes que provocan disturbios: "Quieren crear un fantasma. Eso de los 250 es un invento de Hereu [alcalde de Barcelona]; los verdaderos violentos que habría que erradicar son los promotores inmobiliarios". Ivan va más allá; "No creo que tirar un cohete se pueda considerar violencia. Lo que no se ve en los medios de comunicación son las porras de la policía".
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El colectivo okupa, de fuerte arraigo en Barcelona y su área metropolitana, se expresa con ambigüedad respecto a los episodios de violencia que se repiten en la ciudad. Ivan, del barrio de Sants, rechaza que exista un grupo de jóvenes que provocan disturbios: "Quieren crear un fantasma. Eso de los 250 es un invento de Hereu [alcalde de Barcelona]; los verdaderos violentos que habría que erradicar son los promotores inmobiliarios". Ivan va más allá; "No creo que tirar un cohete se pueda considerar violencia. Lo que no se ve en los medios de comunicación son las porras de la policía".

Algo más comedido se muestra Albert, miembro de la asamblea de okupas de Barcelona. "A nadie le gusta la violencia. Pero hay un caldo de cultivo que ha convertido los enfrentamientos con la policía en una rutina". Albert también niega que haya un núcleo que se escuda en los squatters para provocar altercados: "No hay conspiraciones. Si fuera así, la policía tendría nombres".