Los rectorados mantienen sus reservas a las leyes universitarias del consejero Justo Nieto

Las universidades siguen sin ver claro el nuevo marco legislativo que está diseñando el consejero Justo Nieto. El Consejo Valenciano de Universidades se reunió ayer para discutir los borradores redactados por la consejería -que contemplan algunas de las observaciones planteadas por los rectores a los documentos iniciales-, pero los responsables académicos pidieron tiempo para estudiar unos textos que describen como "densos".

El "paquete legislativo" de Nieto consta de cuatro normas: Las dos de coordinación del sistema universitario y del científico; una relativa a la creación del instit...

Las universidades siguen sin ver claro el nuevo marco legislativo que está diseñando el consejero Justo Nieto. El Consejo Valenciano de Universidades se reunió ayer para discutir los borradores redactados por la consejería -que contemplan algunas de las observaciones planteadas por los rectores a los documentos iniciales-, pero los responsables académicos pidieron tiempo para estudiar unos textos que describen como "densos".

El "paquete legislativo" de Nieto consta de cuatro normas: Las dos de coordinación del sistema universitario y del científico; una relativa a la creación del instituto de enseñanzas artísticas -que el consejero está decidido a aproximar al ámbito académico- y otra, todavía por perfilar, por la que los profesionales podrían matricularse de "conjuntos de créditos" de una carrera sin intención de cursarla en su totalidad. El secretario autonómico de Empresa y Universidad, Emilio Barberá, comentó el ejemplo de un tornero que quisiera recibir formación académica específica sin llegar a completar una ingeniería; y el de un periodista al que le interesara cursar algunas asignaturas de Biología.

A la espera de examinar a fondo los borradores, el rector de la Universitat de València, Francisco Tomás -el único de sus colegas presente en una reunión a la que tampoco asistió Nieto- reiteró las reservas que han venido manifestando las universidades: La ley de coordinación es demasiado "reglamentarista"; incorpora las enseñanzas artísticas superiores al sistema cuando la legislación estatal no lo prevé, y se da un papel "excesivo" a la Agència Valenciana d'Avaluació i Prospectiva (AVAP).

Barberá y el director general José Capilla rechazaron que la ley sea reglamentarista. Afirmaron que la AVAP no limitará la autonomía, sino que servirá para que las universidades "rindan cuentas a la sociedad" de cómo emplean su libertad. Y dijeron que la agencia será objetiva y libre de "influencias".

Las universidades no opinaron sobre la ley que permitirá cursar conjuntos independientes de créditos por considerar demasiado vaga su definición.