La adicción a las compras y a Internet se suman al plan de drogas de Granada
Las compras compulsivas, la anorexia, la bulimia o el uso incontrolado de Internet son algunas de las nuevas adicciones sobre las que pretende actuar el II Plan de Adicciones y Drogodependencias de Granada, que se presentó ayer y estará en vigor hasta 2011. El programa sustituye al primer plan municipal sobre drogas, que se redactó en 1992 y, según la concejal de Bienestar Social, Ana López Andújar, se había quedado "obsoleto". "Ha cambiando el perfil de los drogodependientes, hay nuevas sustancias y un número muy importante de nuevas adicciones que antes ni existían pero que pueden producir l...
Las compras compulsivas, la anorexia, la bulimia o el uso incontrolado de Internet son algunas de las nuevas adicciones sobre las que pretende actuar el II Plan de Adicciones y Drogodependencias de Granada, que se presentó ayer y estará en vigor hasta 2011. El programa sustituye al primer plan municipal sobre drogas, que se redactó en 1992 y, según la concejal de Bienestar Social, Ana López Andújar, se había quedado "obsoleto". "Ha cambiando el perfil de los drogodependientes, hay nuevas sustancias y un número muy importante de nuevas adicciones que antes ni existían pero que pueden producir los mismos efectos nocivos que las drogas tradicionales", afirma López Andújar.
En la redacción del plan, que se llevará al próximo pleno municipal, ha participado el Consejo Municipal de Drogodependencias, del que forman arte todas las asociaciones que trabajan con adictos y toxicómanos. "Su experiencia ha sido fundamental para saber lo que realmente hay en la calle", explicó López Andújar, para quien uno de los objetivos fundamentales del plan es "enseñar a la sociedad a convivir con la presencia de las drogas". "Es una parte de la realidad que no podemos esconder".
El centro provincial de drogodependencias de Granada registró el año pasado 1.356 usuarios, el 84% hombres y el 16% mujeres. El programa municipal supondrá un refuerzo de las actuaciones preventivas, tanto en el ámbito primario (evitar y retrasar el consumo y la edad de inicio), como en el secundario (destinado a los jóvenes que ya han tenido algún contacto con las drogas, pero que aún no son adictos). Para los que ya son considerados drogodependientes, el plan contempla diversos proyectos cuyo objetivo es "reducir riesgos". "Es importante la atención individualizada y que los recursos y los servicios que se les faciliten tengan continuidad", afirma la edil.
En su puesta en marcha se implicarán casi todas las áreas municipales. Aunque el presupuesto global se irá adaptando a las necesidades, algunas Concejalías ya han comprometido una partida anual que va desde los 386.000 euros del Área de Familia a los 12.000 de las de Educación y Medio Ambiente.
Entre todas, pondrán en marcha campañas informativas y aumentarán los recursos disponibles para los drogodependientes. Entre otras medidas, el plan municipal se compromete a facilitar materiales estériles para hacer más seguro el consumo, crear dispositivos de atención en las zonas más frecuentadas por los toxicómanos y aumentar la oferta de "ocio saludable".