EL FUTURO DE LAS REFORMAS ESTATUTARIAS

CiU pretende eliminar parte de los derechos que reconoce el texto

A pesar de que Convergència i Unió (CiU) no ha presentado en el Congreso ninguna enmienda a la propuesta de reforma estatutaria, sus integrantes insinuaron ayer, en plena sesión negociadora, que intentarán modificar a fondo el título de deberes y derechos, una parte del Estatuto que, sobretodo los democristianos de Unió Democràtica, entienden muy alejada de sus postulados morales en algunos de sus artículos.

Según confirmaron diferentes negociadores, el diputado de Unió en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, expresó las reservas de su partido a los artículos 20 y 21 del Estatuto, que hac...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

A pesar de que Convergència i Unió (CiU) no ha presentado en el Congreso ninguna enmienda a la propuesta de reforma estatutaria, sus integrantes insinuaron ayer, en plena sesión negociadora, que intentarán modificar a fondo el título de deberes y derechos, una parte del Estatuto que, sobretodo los democristianos de Unió Democràtica, entienden muy alejada de sus postulados morales en algunos de sus artículos.

Según confirmaron diferentes negociadores, el diputado de Unió en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, expresó las reservas de su partido a los artículos 20 y 21 del Estatuto, que hacen referencia al derecho a morir dignamente y el laicismo de la enseñanza pública. Al afirmar que CiU no renuncia a modificar estos artículos, los democristianos nacionalistas levantaron las iras de Iniciativa per Catalunya (ICV) y de Esquerra Republicana (ERC), que no entienden esa voluntad de cambiar un texto aprobado por ellos mismos hace tres meses en la Cámara catalana.

Más información

El diputado ecosocialista Jaume Bosch acusó por esta razón a los negociadores de CiU de "traición al Parlamento de Cataluña", mientras que el diputado de Esquerra Joan Ridao calificó la maniobra de CiU de "torpedo a la línea de flotación del Estatuto". Todos los negociadores hicieron notar a CiU que el único aliado que encontrará para defender sus tesis en el sentido que desea será el Partido Popular.

La entrada en juego del PP

Tras este episodio, el más tormentoso de la negociación de ayer, Sánchez Llibre justificó su actuación recordando que CiU no votó en el Parlamento catalán el capítulo de deberes y derechos, algo que en su opinión le deja ahora las manos libres para intentar modificarlo, sobre todo a la vista de que el PSOE sí va a conseguir que se modifiquen muchos artículos que CiU apoya.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Pero este encontronazo entre CiU y los dos socios minoritarios del tripartito catalán no empañó el buen clima general de la reunión de ayer, de la que sólo estuvo ausente el PP. El presidente de esta formación en Cataluña, Josep Piqué, convocó a la misma hora de la reunión una conferencia de prensa en la sede del partido para reiterar su ofrecimiento a negociar el Estatuto y asegurar que la participación del PP en el proceso "es más necesaria que nunca". Piqué se lamentó por haber sido "marginado" de la negociación, reservada a los partidos que han impulsado la reforma estatutaria hasta la fecha.

El portavoz del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se alegró de que "finalmente el PP haya querido entrar" en el debate del Estatuto, después de haberlo presentado como el fin de España. Pero minimizó la oferta porque lo que realmente ofrece, dijo, es un pacto "sobre el 25% del Estatuto y la eliminación del 75%" restante. "Todavía están más por la zancadilla que por el juego", afirmó.

Archivado En