El Estado emitirá deuda por 75.100 millones y la reducirá al 33,9% del PIB
El Estado emitirá en 2006 deuda pública bruta por un importe total de 75.100 millones de euros, que servirá para financiar los 61.000 millones que se prevé amortizar el año que viene más las necesidades financieras netas del Tesoro, que se estima alcanzarán 14.081,88 millones de euros el próximo ejercicio. Esta cifra se desglosa en un déficit de caja del Estado previsto de 5.355,79 millones de euros y una variación de activos de 8.726,09 millones.
Según el Proyecto de Ley de Presupuestos para 2006, las emisiones y amortizaciones previstas son "compatibles con una nueva disminución de la...
El Estado emitirá en 2006 deuda pública bruta por un importe total de 75.100 millones de euros, que servirá para financiar los 61.000 millones que se prevé amortizar el año que viene más las necesidades financieras netas del Tesoro, que se estima alcanzarán 14.081,88 millones de euros el próximo ejercicio. Esta cifra se desglosa en un déficit de caja del Estado previsto de 5.355,79 millones de euros y una variación de activos de 8.726,09 millones.
Según el Proyecto de Ley de Presupuestos para 2006, las emisiones y amortizaciones previstas son "compatibles con una nueva disminución de la participación del Estado en la economía". La combinación de un "crecimiento moderado" de la deuda del Estado, junto con una expansión del PIB nominal del 6%, permitirá que, al final del próximo ejercicio, el endeudamiento del Estado baje hasta el 33,9% del PIB, frente al 35,1% en que se prevé que termine este año. El volumen de deuda pública en circulación alcanzará un nominal de 340.640 millones de euros a finales del año próximo, frente a los 323.060 previstos para 2005. La deuda total de las Administraciones Públicas se colocará en el 43% del PIB, frente al 44,3% que se espera para 2005.
Los pagos por intereses de la deuda en circulación alcanzarán el año que viene 15.943 millones de euros en términos de Contabilidad Nacional, importe equivalente al 1,67% del PIB.
El grueso de la nueva financiación pública se captará mediante bonos y obligaciones, de mayor plazo de vencimiento (de 3 a 30 años), frente a las letras, a más corto plazo (6, 12 y 18 meses).