ELA acusa a las empresas de tener una actitud "represiva" con las huelgas

El sindicato nacionalista ELA censuró ayer la actitud "represiva" de las empresas vascas ante las convocatorias de huelga. Germán Kortabarria, secretario general adjunto de la central, aseguró que menos del 10% de los casos de "acoso" de los empresarios a los trabajadores ante la huelga llegan hasta la Inspección de Trabajo o ante los tribunales.

ELA detalló una serie de sentencias recientes que han condenado a empresas por vulnerar el derecho de huelga. En todo caso, Kortabarria destacó que hay un tipo de presión incontrolable: la que, según él, ejercen las empresas sobre sus trabajado...

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El sindicato nacionalista ELA censuró ayer la actitud "represiva" de las empresas vascas ante las convocatorias de huelga. Germán Kortabarria, secretario general adjunto de la central, aseguró que menos del 10% de los casos de "acoso" de los empresarios a los trabajadores ante la huelga llegan hasta la Inspección de Trabajo o ante los tribunales.

ELA detalló una serie de sentencias recientes que han condenado a empresas por vulnerar el derecho de huelga. En todo caso, Kortabarria destacó que hay un tipo de presión incontrolable: la que, según él, ejercen las empresas sobre sus trabajadores temporales que saben que pueden perder la renovación del contrato si se suman a una una protesta.

"Una parte muy importante de la represión, de la actuación contra el derecho de huelga se produce sin papeles y mediante amenazas explícitas y veladas de los empresarios", destacó el dirigente de ELA. Entre las "vulneraciones" apreciadas por los sindicatos, figuran las represalias en las huelgas de solidaridad, que "son perfectamente legales", y la consideración de ilegalidad de los paros por cuestiones formales. En estos casos mostró las sentencias relativas a las protestas de Manufacturas Osoro, Salva Industrial, Tres Mares y la limpiezas de Basauri.

Amenazas

La central destacó también la ilegalidad de las intimidaciones o las amenazas de trasladar el centro de trabajo a otra provincia o país o la denegación de acceso de los representantes y comités de huelga a las empresas, sobre los que esgrimió sentencias como las relativas a Caballito, Correos o el Hotel María Cristina.

Kortabarria se quejó de que son las personas en situación de precariedad las que suelen sufrir de forma más clara las "amenazas" de los empresarios, así como los representantes de los trabajadores en paro, que "están siendo objeto de sanciones, de despidos, de amenazas y de una restricción de sus derechos".

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El dirigente de ELA también criticó la concepción "restrictiva" que tienen las administraciones del orden público, lo que, a su juicio, lleva a actuaciones "inaceptables" contra los piquetes y los comités de huelga. Para ELA, la propia Ertzaintza se está convirtiendo en un "instrumento de protección del empresario".

Kortabarria abogó por incorporar en los contenidos formativos de los ertzainas los derechos y los "márgenes de maniobra" de los trabajadores. "Es necesario incorporar a los criterios de actuación de los rectores de Interior una actuación muy respetuosa con los derechos de huelga", indicó.

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