Clos retirará la comparación entre 'el muro de la vergüenza' y el Holocausto

El Ayuntamiento de Barcelona retirará todas "las afirmaciones que puedan herir la sensibilidad del pueblo judío" del libro Republicans i republicanes als camps de concentració nazis. El manual didáctico, editado por el Instituto Municipal de Educación, levantó las iras de la Embajada de Israel en España a causa de un pasaje en el que se compara el Holocausto con el muro que Israel ha levantado en Cisjordania y el encierro de talibanes en la base de Guantánamo, en Cuba. El embajador de Israel, Víctor Harel, envió el viernes una carta a Clos en la que exigía la retirada inmediata del text...

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El Ayuntamiento de Barcelona retirará todas "las afirmaciones que puedan herir la sensibilidad del pueblo judío" del libro Republicans i republicanes als camps de concentració nazis. El manual didáctico, editado por el Instituto Municipal de Educación, levantó las iras de la Embajada de Israel en España a causa de un pasaje en el que se compara el Holocausto con el muro que Israel ha levantado en Cisjordania y el encierro de talibanes en la base de Guantánamo, en Cuba. El embajador de Israel, Víctor Harel, envió el viernes una carta a Clos en la que exigía la retirada inmediata del texto.

Fuentes municipales explicaron que el alcalde de Barcelona, Joan Clos, repondió ayer a Harel con otra carta en la que le garantiza que la concejal de Educación, Marina Subirats, revisará el manual junto con sus dos autores, los profesores de la Universidad Autónoma de Barcelona Joan Pagès y Montserrat Casas, y retirará las "afirmaciones que puedan herir la sensibilidad del pueblo judío".

Las mismas fuentes señalaron que Clos explica que el libro fue editado con la intención de recordar la tragedia del Holocausto a los escolares de secundaria de la ciudad y, en concreto, el sufrimiento de los republicanos españoles que estuvieron en los campos de concentración. La misiva también recuerda que, en cualquier caso, el texto que ha suscitado la polémica refleja sólo la opinión de los dos autores, que no fue censurada por respeto a la libertad de expresión.

Precisamente, el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, garantizó en su entrevista del domingo con el presidente de Israel, Moshe Katsav, que el manual sería corregido.

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