LAS RELACIONES TRANSATLÁNTICAS

EE UU asegura que las diferencias con Europa sobre Irak están superadas

La secretaria de Estado advierte de que tomará "nuevas medidas" si Irán no cumple sus compromisos

Europa y EE UU escenificaron ayer en Bruselas el reencuentro de amigos distanciados y la apertura de una nueva era de entendimiento transatlántico con motivo de la visita de la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, a la OTAN y a la Comisión Europea. "Las diferencias están superadas", declaró Rice en la sede de la OTAN. "Todos los países están de acuerdo en que hay que apoyar a los iraquíes", señaló el secretario general de la Alianza, Jaap de Hoop Scheffer. "Ahora existe la percepción de que deberíamos trabajar juntos", subrayó el presidente de la Comisión Europea, Durão Barro...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Europa y EE UU escenificaron ayer en Bruselas el reencuentro de amigos distanciados y la apertura de una nueva era de entendimiento transatlántico con motivo de la visita de la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, a la OTAN y a la Comisión Europea. "Las diferencias están superadas", declaró Rice en la sede de la OTAN. "Todos los países están de acuerdo en que hay que apoyar a los iraquíes", señaló el secretario general de la Alianza, Jaap de Hoop Scheffer. "Ahora existe la percepción de que deberíamos trabajar juntos", subrayó el presidente de la Comisión Europea, Durão Barroso.

Más información

Sobre ese soleado paisaje se ciernen dos nubarrones: las discrepancias sobre Irán y sobre el levantamiento del embargo de armas a China. Fue una jornada en la que unos y otros rivalizaron en arrojarse flores, con alusiones a la historia común, desde cómo EE UU encontró su inspiración en los ideales del liberalismo británico y de la Revolución Francesa a cómo EE UU apoyó desde un principio el nacimiento de una Europa fuerte y unida.

Condoleezza Rice visitó por la mañana la sede de la Alianza, donde se reunió en un almuerzo de trabajo con los ministros de Exteriores aliados, excepción hecha de algunos que alegaron razones de calendario para no asistir a la cita. "Nunca había visto una mayor unidad sobre los temas de la agenda como la que he visto durante este almuerzo", dijo luego la secretaria de Estado. Por la mesa pasaron Irak, Afganistán, Oriente Próximo, los Balcanes, con la atención puesta en Kosovo, y las relaciones con Rusia y Ucrania. "Las diferencias están superadas".

"Los tiempos son distintos"

Por la tarde, en la sede de la Comisión, el presidente Barroso convocó a media docena de comisarios a su reunión con la secretaria de Estado para enfatizar a Rice el amplio abanico de cuestiones que implican las relaciones transatlánticas, desde las puras Relaciones Exteriores (Benita Ferrero-Waldner) a la Economía (Joaquín Almunia) o la Justicia, Libertad y Seguridad (Franco Frattini). "Ha habido diferencias en el pasado y las habrá en el futuro", reconoció Rice con realismo, mientras aseguraba que el mensaje expuesto el día anterior en París sobre la voluntad de abrir un nuevo capítulo en las relaciones transatlánticas caló incluso antes de su llegada a Europa. "Los tiempos son distintos a como eran hace dos o tres años, cuando EE UU tenía diferencias con algunos Estados. No teníamos una agenda común en Irak. Ahora la tenemos", subrayó.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Irak fue el catalizador de la crisis transatlántica, pero en la sede de la OTAN se dio ayer por doblado el cabo de las diferencias a la luz de la participación de los iraquíes en las elecciones. "Todos han estado de acuerdo en que hay que apoyar a los iraquíes y hacer lo que nos ha pedido el Gobierno iraquí", en referencia a la formación de mandos militares, señaló De Hoop Scheffer. "Mi objetivo es que lo antes posible todos, los 26, contribuyan a la preparación de las fuerzas de seguridad, dentro del país, fuera o con financiación". Barroso aseguró que la visita de George Bush el próximo día 22 probará que "los lazos son mucho más fuertes que las diferencias que hayamos podido tener". Según el presidente de la Comisión, "Europa necesita a Estados Unidos y Estados Unidos necesita a Europa. Los problemas globales son demasiado complejos como para abordarlos en solitario".

Rice llegó a Bruselas precedida por unas declaraciones realizadas a la cadena de televisión Fox, favorita de los republicanos, en las que advertía a Irán de que podría ser llevado ante el Consejo de Seguridad de la ONU por su política nuclear y hacía notar que los europeos no transmiten debidamente a Teherán la gravedad de su situación.

En Bruselas, Rice subrayó que no hay una fecha límite para los iraníes, "que deben aprovechar la oportunidad que les dan los europeos" de poner sus planes nucleares en claro. "Ahora es el momento de la diplomacia". "Creo que todos están diciendo a los iraníes que van a tener que cumplir con sus obligaciones internacionales, o habrá nuevas medidas en perspectiva", aseguró ante la prensa. "Y creo que todos entienden qué significa 'nuevas medidas".

El propósito europeo de levantar este mismo año el embargo de armas a China es el otro gran punto de desacuerdo transatlántico. El embargo fue impuesto en 1989 a raíz de los incidentes en la plaza de Tiananmen. La UE considera que la relación con China ha cambiado drásticamente desde entonces y que el embargo ya no tiene razón de ser como medida de represalia.

"Los derechos humanos deben ser tenidos en cuenta en cualquier decisión, porque fue lo que se tuvo en cuenta entonces, y todavía hay 2.000 presos de Tiananmen", señaló Rice, antes de pasar a motivos más realistas de preocupación: "El equilibrio militar, que hay americanos en la zona y el efecto de la transferencia de tecnología sobre ese equilibrio militar". Otra alta fuente de la Administración lo expresó de otro modo en una reciente visita: "Estamos hablando de que los europeos hagan más fácil a los chinos el matar estadounidenses". Barroso respondió que "la UE no tiene interés en aumentar la cantidad y calidad de las armas en la zona".

Miguel Ángel Moratinos y Condoleezza Rice, ayer en Bruselas.REUTERS

Archivado En