Dos internos en un centro de menores de Tenerife prenden fuego a un compañero

Dos internos del centro en régimen cerrado para menores de Valle Tabares (en Santa Cruz de Tenerife) propinaron una paliza, rociaron con colonia y prendieron fuego a otro compañero, que pudo salvar la vida al meterse en una de las duchas, según un portavoz de la Policía Nacional.

La agresión se produjo a primeras horas del domingo pasado, pero no se conoció hasta ayer. La víctima fue trasladada en ambulancia hasta el Hospital Universitario de Canarias con múltiples heridas en cabeza, cuello, hombros y rotura del tabique nasal, aunque no fue necesario su ingreso. La Consejería de Asuntos...

Dos internos del centro en régimen cerrado para menores de Valle Tabares (en Santa Cruz de Tenerife) propinaron una paliza, rociaron con colonia y prendieron fuego a otro compañero, que pudo salvar la vida al meterse en una de las duchas, según un portavoz de la Policía Nacional.

La agresión se produjo a primeras horas del domingo pasado, pero no se conoció hasta ayer. La víctima fue trasladada en ambulancia hasta el Hospital Universitario de Canarias con múltiples heridas en cabeza, cuello, hombros y rotura del tabique nasal, aunque no fue necesario su ingreso. La Consejería de Asuntos Sociales del Gobierno de Canarias, responsable del centro, le ha ingresado en otro piso de la isla y ha abierto un informe, además de comunicar lo sucedido a la Fiscalía de Menores, afirmó la titular del departamento, Águeda Montelongo (del PP). El portavoz policial confirmó que uno de los dos agresores ya tiene 18 años y cuenta con amplio historial de agresiones y delitos contra la propiedad.

El Gobierno de Canarias, a través de la Fundación Ideo, gestiona 200 plazas para menores en seis centros. En el de Valle Tabares, uno de los más conflictivos junto con el de La Montañeta en Gran Canaria, residen 45 menores o jóvenes que, aunque pueden haber cumplido los 18 años, purgan sentencias por delitos cometidos hace tiempo.

La saturación de esos centros, con numerosos episodios de violencia entre los internos y de éstos hacia los educadores y vigilantes, ha sido denunciada varias veces por la Fiscalía de Menores y el Diputado del Común, una figura similar al Defensor del Pueblo para las islas.