Olimpiada de los quesos

En la capital del cantón más pequeño de Suiza, Appenzell, se celebran, entre el 29 y el 31 de octubre, las III Olimpiadas de los Quesos de Montaña, con más de 300 participantes y un nutrido programa de festejos. La ciudad, con una población de unas 15.000 almas, arropada entre colinas prealpinas, verdes a rabiar, rebosantes de vacas rubias y candongas, parece de cuento. Y si en jornada rutinaria resulta radiante, los días de fiesta el delirio de colores y alboroto musical rompe el corsé de seriedad helvética. Por ejemplo, en este festival quesero, impulsado por una asociación de productores de...

En la capital del cantón más pequeño de Suiza, Appenzell, se celebran, entre el 29 y el 31 de octubre, las III Olimpiadas de los Quesos de Montaña, con más de 300 participantes y un nutrido programa de festejos. La ciudad, con una población de unas 15.000 almas, arropada entre colinas prealpinas, verdes a rabiar, rebosantes de vacas rubias y candongas, parece de cuento. Y si en jornada rutinaria resulta radiante, los días de fiesta el delirio de colores y alboroto musical rompe el corsé de seriedad helvética. Por ejemplo, en este festival quesero, impulsado por una asociación de productores de Italia, Suiza y Francia. El certamen (al que acuden también quesos españoles) será resuelto por un jurado internacional de 100 expertos, y, entre otras cosas, estas olimpiadas contarán con seminarios, mesas redondas y un gran mercado. Alegres fanfarrias barrerán las calles y en las tabernas. Además de música habrá vino y muchas tapas y fruslerías hechas con queso.

Es una oportunidad para acercarse al queso appenzeller, resultado de una compleja elaboración. Tras los pasos iniciales, cada pieza (una rueda de casi medio metro de diámetro) es llevada a unos sótanos donde se lavan a diario, una por una, con una salmuera de hierbas montaraces cuya fórmula es secreta. Luego estarán afinándose en cavas durante tres, cuatro, seis o más meses.

- Información: Quesos de Suiza (934 34 21 98; www.caseusmontanus.ch).