Un fallo en la matrícula deja a decenas de alumnos fuera de la Escuela de Idiomas

Decenas de alumnos que siguieron las instrucciones de matrícula de la página de Internet de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI) de Valencia no podrán cursar las asignaturas debido a un error en el sistema. Los afectados utilizaron la posibilidad de domiciliar el pago de las tasas a través de la red. Una fórmula que, al presentarse a realizar los exámenes de acceso, resultó no ser válido. El secretario del organismo achacó ayer el fallo a los servicios de informática de la consejería de Educación.

La página de la Escuela informa de que la preinscripción para las pruebas de nivel debía re...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Decenas de alumnos que siguieron las instrucciones de matrícula de la página de Internet de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI) de Valencia no podrán cursar las asignaturas debido a un error en el sistema. Los afectados utilizaron la posibilidad de domiciliar el pago de las tasas a través de la red. Una fórmula que, al presentarse a realizar los exámenes de acceso, resultó no ser válido. El secretario del organismo achacó ayer el fallo a los servicios de informática de la consejería de Educación.

La página de la Escuela informa de que la preinscripción para las pruebas de nivel debía realizarse entre el 1 y el 14 de septiembre por Internet. Hasta tal punto era obligatorio utilizar este sistema que aquellos estudiantes que acudían a preinscribirse a la sede de la escuela eran conducidos a las aulas de informática para que cumplimentaran allí el formulario. Éste ofrecía la posibilidad de efectuar el pago de las tasas por medio de domiciliación bancaria. Un sistema que, sin embargo, no es reconocido por el centro, aunque sí por otras delegaciones de la EOI de la Comunidad Valenciana, según explicó el secretario de la Escuela de Valencia.

Para mayor confusión, un apartado de la página de Internet señala que las tasas tenían que pagarse "en la secretaria del centro" entre el 23 y el 24 de septiembre; y otro es una "cláusula de exención de responsabilidad de la Escuela Oficial de Idiomas de Valencia" sobre la información de su propia página.

María Ángeles Borja, trabajadora social, siguió los pasos y rellenó el apartado de domiciliación bancaria. Una vez cumplimentado, el sistema le comunicó que la solicitud había sido aceptada y le facilitó un número para el sorteo que determinaría quién podía presentarse a las pruebas de nivel. Poco después, y siempre vía Internet, comprobó que formaba parte de los 3.000 elegidos. Al concurso se habían presentado 20.000 solicitudes. Le sirvió de poco, porque al presentarse le dijeron que el sistema empleado para el abono de las tasas no era válido.

"Yo leí lo del pago en la sede", dice Borja, "pero supuse que iba dirigido a quienes no lo habían domiciliado. Y pensé también que era imposible que atendieran a 3.000 personas entre la tarde del 23 y el día 24 teniendo horario de oficina".

Sobre la firma

Archivado En