El Fórum dona un millón de euros para rehabilitar plazas de Tetuán

Calles estrechas, pasadizos, casas blancas que trepan por una de las laderas de la montaña donde se asienta la ciudad de Tetuán, en Marruecos, y pequeñas plazas que hacen de nudo de conexión en ese laberinto. Son esos espacios, cinco encantadoras plazas, los que se rehabilitarán por un convenio firmado entre el Fórum, que destinará un millón de euros, y las autoridades de Tetuán. La firma del convenio se realizó ayer en una de las casas de la medina.

El Fórum decidió destinar el 0,7% de los ingresos por la venta de entradas y el 0,3% del patrocinio a un proyecto y optó por el de la medi...

Calles estrechas, pasadizos, casas blancas que trepan por una de las laderas de la montaña donde se asienta la ciudad de Tetuán, en Marruecos, y pequeñas plazas que hacen de nudo de conexión en ese laberinto. Son esos espacios, cinco encantadoras plazas, los que se rehabilitarán por un convenio firmado entre el Fórum, que destinará un millón de euros, y las autoridades de Tetuán. La firma del convenio se realizó ayer en una de las casas de la medina.

El Fórum decidió destinar el 0,7% de los ingresos por la venta de entradas y el 0,3% del patrocinio a un proyecto y optó por el de la medina de Tetuán por ser un espacio declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y por su singularidad en comparación con otras medinas de Marruecos. Uno de los puntos que la hace especial es su origen: fue construida por andaluces en los siglos XV y XVI y, más tarde, por los moriscos y judíos que procedían de España. La medina de Tetuán fue un símbolo de interculturalidad en un tiempo en el que la ciudad era la capital del norte de Marruecos. En ella se aposentaron todo tipo de artesanos: tejedores, curtidores, zapateros, y muchos más de oficios que han subsistido hasta hoy. Las callejas de la medina son un discurrir de pequeños locales de artesanos o de espacios mayores en los que todavía se curte la piel con el método tradicional: agua y cal en pozos que desprenden un penetrante olor.

Junto a ese tipo de comercio hay otro, el que cubre las necesidades cotidianas de los vecinos. Todo está mezclado en un abigarrado espacio en el que se nota el paso del tiempo y la necesidad de efectuar una intervención en infraestructuras y rehabilitación si se quiere mantener esta zona. Se han realizado ya algunos proyectos de mejora de parte del espacio, como uno subvencionado por la Junta de Andalucía.

La intervención que se llevará a cabo ahora y terminará antes de que acabe el año se centra en cinco plazas y las calles que acceden a ellas, con el objetivo de configurar un eje peatonal. Pavimentación, mejora de los sistemas de iluminación, recuperación de fachadas y de puertas antiguas, así como la reordenación del comercio, son algunas de las acciones que se realizarán con el objetivo final de recuperar arquitectónica y culturalmente la medina. Como otros espacios antiguos urbanos, la medina de Tetuán ha sufrido el proceso de la llegada de mucha población procedente del interior del país. A ello se suma un notable auge turístico. Rachid Talbi, alcalde de Tetuán y viceprimer ministro adjunto del Gobierno marroquí, manifestó que un objetivo de Tetuán es desarrollar más el sector turístico y cultural como uno de los potenciales más claros de la ciudad. Talbi fue uno de los firmantes del convenio de rehabilitación con el alcalde de Barcelona, Joan Clos. A la firma también asistieron el gobernador de la región, el embajador de España en Marruecos, Luis Plana, y otros representantes diplomáticos. Fue un acto en el que se habló de la medina, pero también, y mucho, de las relaciones entre ambos países: "La relación entre Barcelona y Tetuán es un ejemplo de buena vecindad", subrayó el alcalde de Tetuán. "Europa está inclinada a la ampliación hacia el este. Nosotros creemos que nuestra prioridad debe estar en el sur, donde hay que propiciar el desarrollo de la economía", apuntó Clos. La renta per cápita de la zona es de 1.500 euros.

El consistorio de Barcelona ya ha realizado otras intervenciones, como la mejora de un barrio periférico de Tetuán que se levantó básicamente con autoconstrucciones. En Koraat Sbaa, donde viven unas 65.000 personas, se han legalizado las autoconstrucciones, se levanta una escuela y también un parque.En este caso, la financiación procedió del Banco Mundial.