El Parlamento debatirá si se dispensa cannabis a ciertos enfermos en las farmacias

El Parlamento va a entrar en el debate sobre la dispensación controlada de cannabis a través de la red de farmacias a las personas que actualmente se medican con esta sustancia y lo hacen de forma inadecuada por no disponer de la información precisa. El PSE es quien ha promovido este debate al presentar una proposición no de ley en la Cámara abogando por la dispensación terapéutica del cannabis. Con anterioridad, los socialistas también propiciaron debates como la apertura de narcosalas o la dispensación de heroína bajo control médico para los drogadictos que fracasan con otros programa...

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El Parlamento va a entrar en el debate sobre la dispensación controlada de cannabis a través de la red de farmacias a las personas que actualmente se medican con esta sustancia y lo hacen de forma inadecuada por no disponer de la información precisa. El PSE es quien ha promovido este debate al presentar una proposición no de ley en la Cámara abogando por la dispensación terapéutica del cannabis. Con anterioridad, los socialistas también propiciaron debates como la apertura de narcosalas o la dispensación de heroína bajo control médico para los drogadictos que fracasan con otros programas.

El objetivo de la iniciativa es asegurar un uso racional del cannabis por parte de los ciudadanos que lo consumen para combatir los dolores de enfermedades como la fibromialgia o para aliviar las náuseas generadas por los tratamientos contra el cáncer. La iniciativa del PSE se inspira en el plan piloto que ha puesto en marcha el Gobierno de Cataluña después de comprobar a través de un estudio realizado por el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona que el 57% de las personas que usan el cannabis para calmar los dolores lo hace de una manera incorrecta.

El PSE entiende que no se puede seguir instrumentalizando el debate sobre la legalización o no de esta planta para un consumo con fines recreativos para frenar a su vez la investigación sobre su uso terapéutico. El propio Colegio de Farmacéuticos de Barcelona asegura en su estudio que ha quedado demostrada la eficacia del cannabis en el tratamiento de determinadas enfermedades.

Además de instar al Departamento de Sanidad a cooperar con los farmacéuticos vascos para dispensar bajo control el cannabis, la proposición de los socialistas incluye una solicitud a la Agencia Estatal del Medicamento para que permita la administración legal de esta sustancia con fines médicos, con lo que se daría seguridad a las personas que ya lo utilizan.

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