Washington admite que hay 40 rehenes de 12 naciones

La lista de los extranjeros secuestrados en Irak es más larga de lo que se conoce. "Estimamos que su número es de aproximadamente 40 de 12 países", admitió ayer Dan Senor, el portavoz de la Autoridad Provisional de la Coalición. Poco después se conoció un nuevo caso, un camarógrafo francés, con el se elevan a 21 los rehenes identificados. A lo largo del día la puesta en libertad de cinco ucranios y tres rusos capturados la noche anterior quedó eclipsada por la confirmación de que cuatro italianos se hallan también secuestrados. Los italianos trabajan en una empresa de seguridad de EE UU y sus ...

La lista de los extranjeros secuestrados en Irak es más larga de lo que se conoce. "Estimamos que su número es de aproximadamente 40 de 12 países", admitió ayer Dan Senor, el portavoz de la Autoridad Provisional de la Coalición. Poco después se conoció un nuevo caso, un camarógrafo francés, con el se elevan a 21 los rehenes identificados. A lo largo del día la puesta en libertad de cinco ucranios y tres rusos capturados la noche anterior quedó eclipsada por la confirmación de que cuatro italianos se hallan también secuestrados. Los italianos trabajan en una empresa de seguridad de EE UU y sus secuestradores exigen no sólo la retirada de las tropas italianas de Irak, sino también una disculpa del primer ministro, Silvio Berlusconi, televisada por un canal árabe vía satélite. "Queremos dejar claro que no habrá negociaciones con los secuestradores y que beneficia a todos que los rehenes sean liberados cuanto antes", manifestó Senor. Pero si EE UU no quiere negociar, los países que tienen nacionales secuestrados intentan por todos los medios establecer contactos.

Diplomáticos rusos, palestinos, chinos y japoneses han pasado en las últimas 48 horas por la mezquita de Umm al Qora (la antigua Madre de Todas las Batallas), en Bagdad, en busca de noticias. Allí tiene su sede el Comité de los Ulemas, una de las más altas instancias suníes del país, cuyos miembros juegan ambiguamente a mediadores. Allí llegaron en la noche del lunes siete ciudadanos chinos liberados tras su intervención.

"Me llamaron del puesto de control de la entrada para decirme que había unos hombres que traían a los siete secuestrados chinos", explica Abdel Salam al Qubaisy como si recibir rehenes fuera lo más habitual del mundo. "Me dijeron que habían oído nuestro llamamiento y habían decidido dejarles en libertad", justifica este miembro del Comité. "Entonces llamé a la Embajada china y enseguida se presentó un diplomático que hablaba un buen árabe y que me dio las gracias", añade.

Ayer por la mañana les tocó el turno a los diplomáticos rusos y al embajador palestino. Horas después de su visita a Umm al Qora, quedaban en libertad los cinco ingenieros ucranios y los tres rusos de la empresa Interenergoservis secuestrados en la noche del lunes en su casa de las afueras de Bagdad. "Una vez que comprobaron su nacionalidad, les pidieron disculpas y les pusieron en un taxi", explicó un diplomático ruso que aún no les había visto.

Más difícil está el caso de Nabil George Marzuk que aunque el palestino viajaba con documentación israelí. Como al canadiense de origen sirio, sus captores les acusan de espías.

Además de los palestinos, el francés y los cuatro italianos, se ha anunciado también el secuestro de nueve estadounidenses, tres checos y tres japoneses. Según Al Qubaisy, la liberación de estos últimos se canceló ayer en el último minuto porque sus captores "cambiaron de opinión después de que el primer ministro japonés les calificara de terroristas".