Maragall apuesta en Davos por una política internacional "potente" de Cataluña

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, dejó ayer claro en Davos, donde concluyó el Foro Económico Mundial, que impulsará una política internacional "potente" que tendrá como prioridad el área del Mediterráneo. Maragall se mostró convencido de que muchos de los líderes que han participado en el foro acudirán a partir de mayo a Barcelona con motivo del Fòrum de les Cultures, una cita que a juicio del presidente catalán es clave para la potenciación del diálogo en el Mediterráneo, requisito que consideró previo a la paz y la seguridad.

Maragall acudió por primera vez a Davos co...

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, dejó ayer claro en Davos, donde concluyó el Foro Económico Mundial, que impulsará una política internacional "potente" que tendrá como prioridad el área del Mediterráneo. Maragall se mostró convencido de que muchos de los líderes que han participado en el foro acudirán a partir de mayo a Barcelona con motivo del Fòrum de les Cultures, una cita que a juicio del presidente catalán es clave para la potenciación del diálogo en el Mediterráneo, requisito que consideró previo a la paz y la seguridad.

Maragall acudió por primera vez a Davos como presidente de la Generalitat siguiendo el mismo criterio que su predecesor, Jordi Pujol, quien no se perdió ni una cita en sus 23 años como presidente y que tampoco se ha perdido esta edición. El presidente de la Generalitat viajó a Suiza, dijo, porque en ningún otro lugar "hay tanta información por metro cuadrado" y con el objetivo de promover el Fòrum de les Cultures de Barcelona, que iniciará su recorrido en mayo, como un precioso instrumento de diálogo, la clave, según Maragall, para que haya paz y prosperidad.

El Fòrum 2004, del que ayer habló Maragall, aspira a convertirse en un puente entre dos mundos que hasta ahora han vivido de espaldas: el de Davos, que representa el motor de la globalización y a sus principales beneficiarios, y el de Porto Alegre, que pretende regular el proceso y extender a todos los derechos sociales.

"La conclusión a la que se va llegando", afirmó Maragall, "es que sin un mayor entendimiento y sin un diálogo más profundo es muy difícil que haya seguridad, y ésta se ve como condición para la prosperidad económica". Y añadió: "Primero, comprensión de la pobreza y diálogo entre las culturas; segundo, seguridad, y tercero, prosperidad. Éste es el orden lógico de las cosas".

En su opinión, el Fòrum de les Cultures responde de lleno a este propósito y servirá para reforzar específicamente el diálogo en el Mediterráneo y el papel de Cataluña. El presidente de la Generalitat insistió en que su objetivo es que Cataluña tenga una presencia internacional "sostenida y potente" en ámbitos internacionales como la Unión Europea y, muy particularmente, el área mediterránea. "Cataluña no sólo quiere darse a conocer, sino también proponer", explicó el dirigente socialista, quien abogó en varios de los seminarios del foro por favorecer la ampliación de los nexos de Turquía con la Unión Europea: "En Davos hemos podido participar en el dibujo de lo que será la región mediterránea; nosotros hemos jugado a favor de la ampliación y la integración de Turquía", afirmó.

"El Mediterráneo debe volver a ser un escenario importante en el mundo y Cataluña está muy implicada en ello", explicó el presidente de la Generalitat. Para lograrlo, añadió, "es importante que sea un escenario de paz y el centro de un diálogo internacional, y esto es lo que será el Fòrum de les Cultures".

El jefe del Ejecutivo catalán reclamó una mayor presencia de Cataluña en las instituciones europeas: "Hay que revisar el papel de las autonomías, y concretamente de las nacionalidades históricas de España, en la Unión Europea; somos partidarios de una presencia más sostenida, más importante y más potente, y la tendremos", dijo.

En la última jornada del foro, Maragall se entrevistó con la presidenta y consejera delegada de Helwett Packard, Carly Fiorina, a la que invitó a Barcelona para conocer el proyecto 22@ y el Fòrum 2004, y con el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet.