Forges, Gallego & Rey, Toni y Ferreres inauguran la biblioteca de 'El Jueves'

Ediciones El Jueves quiere sublevarse ante el espacio cada vez más reducido que ocupan los títulos de humor en las librerías y se ha puesto manos a la obra. El miércoles se presentaron en Madrid dos libros que recogían las mejores viñetas publicadas en EL PAÍS en 2003 por Antonio Fraguas, Forges; y las de Julio Rey y José María Gallego, conocidos como Gallego & Rey, en el diario El Mundo. La semana pasada, Ferreres, de El periódico de Catalunya, y Toni, de La Vanguardia, hicieron lo propio en Barcelona.

Cada viñetista ha seleccionado los 120 dibujos que le ha...

Ediciones El Jueves quiere sublevarse ante el espacio cada vez más reducido que ocupan los títulos de humor en las librerías y se ha puesto manos a la obra. El miércoles se presentaron en Madrid dos libros que recogían las mejores viñetas publicadas en EL PAÍS en 2003 por Antonio Fraguas, Forges; y las de Julio Rey y José María Gallego, conocidos como Gallego & Rey, en el diario El Mundo. La semana pasada, Ferreres, de El periódico de Catalunya, y Toni, de La Vanguardia, hicieron lo propio en Barcelona.

Cada viñetista ha seleccionado los 120 dibujos que le han parecido más interesantes. El propósito de El Jueves es que la colección se agrande con los dibujos de otros humoristas en los años venideros. "Estas obras deben leerse detenidamente porque cada tira concentra un trozo de la historia", aconseja Toni.

¿Cómo resumir el año 2003? Forges es tremendamente esquemático. "Ha sido una anualidad en la que se ha demostrado sobradamente: a) lo que significa la violencia incuria del Imperio; b) lo que significa lo cenutrio que es Bush; c) lo que significa que el encargao sudeuropeo se llame Chema, y d) lo que significa que el interfecto se va, pero nos deja metidos en un buen follón el muy ciezo", un texto que compartieron en lectura Gallego & Rey.

Gallego & Rey, más extensos en su evaluación, recordaron la guerra de Irak, "en la que uníamos nuestro tintero al de nuestros colegas de todo el mundo para satirizar la hipocresía". Ellos dibujaron a Aznar, "el personaje de bigote lleno de petróleo", como un doberman que aullaba con el resto de perros de Bush, convertido en Rambo; o al presidente de Estados Unidos subido al caballo del Guernica de Picasso.

"Esta colección dignifica las estanterías de las grandes superficies con algo tan importante como el humor. Los ministros portavoces del Gobierno o los caricatos son otra cosa, no humor", sentenció Forges. "Éste es uno de los momentos en los que se ha visto más la ideología de los viñetistas", razonó Rey, quien en el trabajo a dúo aporta el criterio periodístico para que luego Gallego traslade la idea al dibujo. "La prensa está sufriendo un cambio y las únicas trincheras que quedan son las viñetas, y la gente acude a ellas", prosiguió.

Forges, que ha hecho dos películas y tres series de televisión, comparó el humor "peculiar" de Aznar con el de Rouco Varela y aseguró que el ex presidente Leopoldo Calvo-Sotelo tiene "un humor impresionante, una retranca que viene bien salvo a algunos generales". A otro gallego, Mariano Rajoy, le deseó que "La Moncloa no le meta mucha bulla" y conserve su ironía.