Inventario de joyas urbanas

Las lagunas de información arquitectónica sobre barrios de la importancia de Salamanca, Argüelles o Tetuán han desaparecido. Acaba de ser recuperada la memoria completa de las obras madrileñas de arquitectos de la importancia de Ángel Laciana, José de Azpiroz, Javier Ferrero o Casto Fernández-Shaw. El conocimiento de esos barrios y las realizaciones de estos alarifes aparecen inventariadas y detalladamente expuestas por primera vez al completo en Arquitectura de Madrid. Se trata de una guía ilustrada y fotografiada, aderezada con cuidadas planimetrías y croquis, recién editada por la Fu...

Las lagunas de información arquitectónica sobre barrios de la importancia de Salamanca, Argüelles o Tetuán han desaparecido. Acaba de ser recuperada la memoria completa de las obras madrileñas de arquitectos de la importancia de Ángel Laciana, José de Azpiroz, Javier Ferrero o Casto Fernández-Shaw. El conocimiento de esos barrios y las realizaciones de estos alarifes aparecen inventariadas y detalladamente expuestas por primera vez al completo en Arquitectura de Madrid. Se trata de una guía ilustrada y fotografiada, aderezada con cuidadas planimetrías y croquis, recién editada por la Fundación del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid y puesta a la venta por 60 euros.

El libro, en tres tomos, brinda a sus lectores casi todas las claves para moverse con información y desenvoltura por entre la compleja trama urbana y tectónica madrileña. Un equipo de una decena de personas, bajo la dirección de Amparo Berlinches y la coordinación de Paloma Barreiro, formado por arquitectos, historiadores, documentalistas y expertos en diseño y fotografía, ha sometido la ciudad a un estrecho marcaje.

Tras unificar criterios de actuación, han pateado durante casi tres años la almendra central y el casco histórico madrileño al completo, así como lo que denominan Ensanches, es decir, el ámbito urbano comprendido dentro de la circunvalación de la M-30. Y ello para fotografiar, registrar, documentar, definir y levantar planos de cada casa o rincón madrileños dotados de significación tectónica o urbana.

El libro tiene la forma de una guía ilustrada con fotografías y va provisto de una cuidada planimetría en CD, que incorpora, además, pinceladas sobre el estilo estético de las construcciones seleccionadas, hasta 2.280. Es un libro heredero de aquella Guía que editó el Colegio Oficial de Arquitectos en 1982 y que hasta 1999, en que este equipo profesional recogió su antorcha, había permanecido sin apenas renovación, pese al crecimiento ciclópeo de la ciudad.

Madrid es una ciudad muy bella, pero siempre ha estado en extremo fragmentada. Sus edificios y rincones componen elementos de hermosura probada, pero entre tales fragmentos apenas han existido lazos que los conectaran. Coexistían con zonas destartaladas o desmemoriadas de aquellos elementos arquitectónicos propios y de valor que contenían. Cuantos forasteros visitan Madrid, desde hace siglos, han acusado esta fragmentación. Desde el escritor francés Teófilo Gautier, cuya llegada a finales del siglo XIX hoy rememora una placa impostada sobre el muro de una casa de la calle de Caballero de Gracia, detrás de la Gran Vía, hasta el escritor porteño Jorge Luis Borges, que residiera con su familia en un hotel de la Puerta del Sol en el primer cuarto del siglo XX.

Algunos escritores madrileños como Ramón Gómez de la Serna o Federico Carlos Sainz de Robles han buscado durante el pasado siglo cicatrizar estos fragmentos de la ciudad con relatos literarios cargados de vocación unificante, regada de erudición, madrileñismo o ironía; pero carecieron de una base objetiva y descriptiva, de un mapa gráfico y palpable de los tesoros madrileños. Ahora, con Arquitectura de Madrid, se dispone ya de de esa descripción que compendia los tesoros arquitectónicos y permite ensamblar las piezas, bellas pero dispersas, que Madrid guarda.