Agricultura retrasa a 2004 las ayudas de este año a los apicultores

Advierte, además, que éstas dependen de la existencia de crédito

La Consejería de Agricultura publicó ayer con meses de retraso y con cargo a los presupuestos de 2004 la orden de ayudas a los agricultores por el decreto de la pinyolà, por el que se regula el alejamiento de los campos citrícolas de las colmenas para evitar la aparición de semillas en la fruta. En la orden publicada ayer, además, advierte que el cobro está condicionado a la existencia de crédito en dichos presupuestos.

Los apicultores son conscientes de su carácter minoritario, sobre todo, comparado con la otra parte en discordia: el sector citrícola. Pese a ello, las organizaci...

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La Consejería de Agricultura publicó ayer con meses de retraso y con cargo a los presupuestos de 2004 la orden de ayudas a los agricultores por el decreto de la pinyolà, por el que se regula el alejamiento de los campos citrícolas de las colmenas para evitar la aparición de semillas en la fruta. En la orden publicada ayer, además, advierte que el cobro está condicionado a la existencia de crédito en dichos presupuestos.

Los apicultores son conscientes de su carácter minoritario, sobre todo, comparado con la otra parte en discordia: el sector citrícola. Pese a ello, las organizaciones agrarias se mostraron muy críticas con el decreto.

Las ayudas publicadas ayer en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) suman 5,4 millones de euros con cargo a los presupuestos de 2004. Este retraso en el pago de un año al siguiente se produce por primera vez desde que se empezaron a arbitrar las mismas, en 2000 y plantea un problema en 2004, ya que el Consell deberá proveer fondos si quiere hacer frente al compromiso ese año. La orden, con todo, advierte que la concesión de las mismas "estará condicionada a la existencia en los presupuestos de 2004 de crédito adecuado y suficiente para ello".

La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) criticó la "tardanza" en la publicación de la orden, que debería haberse concretado en junio y "su escasa dotación económica que no compensa los costes de retirar las colmenas" que estima en 72,12 euros (mientras que Agricultura cubre un máximo de 28 euros). El responsable del sector apícola de la Unió, Antonio Picot, consideró "un parche" la orden. Picot recordó que Agricultura está pagando ahora el 30% pendiente de 2002 y criticó que el decreto regule, entre otros temas, que las ayudas se concedan por colmena inscrita en el registro pertinente siempre que la cifra no supere la de las colmenas inscritas en enero de 2001. La Unió recurrirá este decreto.

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