La Casa Blanca, preocupada por el Estado de derecho en Rusia
El desarrollo del caso Yukos ha generado serias preocupaciones en el Gobierno estadounidense, según ha reconocido ayer el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan. "La forma en que este caso ha sido tratado ha generado preocupaciones sobre el Estado de derecho y el clima de negocios en Rusia", afirmó el portavoz en rueda de prensa.
McClellan pidió al Gobierno ruso que tome las medidas necesarias para despejar las sospechas de intervención política en el caso, particularmente en la detención de su antiguo jefe, el multimillonario Mijaíl Jodorkovski. "Es importante que las autor...
El desarrollo del caso Yukos ha generado serias preocupaciones en el Gobierno estadounidense, según ha reconocido ayer el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan. "La forma en que este caso ha sido tratado ha generado preocupaciones sobre el Estado de derecho y el clima de negocios en Rusia", afirmó el portavoz en rueda de prensa.
McClellan pidió al Gobierno ruso que tome las medidas necesarias para despejar las sospechas de intervención política en el caso, particularmente en la detención de su antiguo jefe, el multimillonario Mijaíl Jodorkovski. "Es importante que las autoridades rusas hagan todo lo posible para disipar las preocupaciones de que este caso podría tener motivaciones políticas", señaló el portavoz.
Por su parte, el influente asesor del Pentágono Richard Perle dijo ayer en Berlín que la detención de Jodorkovski respondía a razones políticas. Perle afirmó en un tono muy crítico que Rusia debería ser expulsado del G-8. "Creo que deberíamos suspender la participación de Rusia del G-8", afirmó, "la forma en que han tratado a Jodorkovksi es totalmente inconsistente con los principios y valores de los otros siete", añadió y apeló a mantener la atención sobre el caso. "No debemos ignorar esto. Si lo ignoramos, habrá más de lo mismo".
Por otra parte, petroleras extranjeras que operan en Rusia, como ExxonMobil, han renovado su compromiso de mantener sus explotaciones en Rusia. De hecho, esta compañía ya ha manifestado su interés de participar en la petrolera Yukos. Tanto ExxonMobil como ChevronTexaco, ambas estadounidenses y competidoras de Yukos en territorio ruso, han privilegiado sus contactos directos con el Kremlin a la hora de encontrar vías de negociación, informa Le Monde. Además de posibles participaciones en la antigua compañía del magnate Jodorkovksi, estas empresas buscan en Moscú la realización de los acuerdos energéticos alcanzados entre el presidente estadounidense, George W. Bush, y su homólogo Vladímir Putin en mayo pasado. Rusia ha exportado a EE UU 1,1 millones de toneladas de petróleo en la primera mitad de año.