Exteriores agrupa a su personal en Bagdad ante el riesgo de atentados

El embajador Benzo se muda a una zona protegida por EE UU

El Gobierno español ha decidido concentrar a los siete funcionarios nacionales destinados a Irak en el edificio de la Embajada y en la residencia del embajador ante la actual situación de peligro que sufre Bagdad con numerosos atentados terroristas. La medida se adoptó tras el asesinato, el pasado jueves, del agente secreto español José Antonio Bernal. También ha cambiado de residencia, a una zona defendida por el Ejército de EE UU, el embajador Miguel Benzo, máximo representante español en la Autoridad Civil Provisional de Irak (CPA). Además de los siete funcionarios, dos de ellos diplomático...

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El Gobierno español ha decidido concentrar a los siete funcionarios nacionales destinados a Irak en el edificio de la Embajada y en la residencia del embajador ante la actual situación de peligro que sufre Bagdad con numerosos atentados terroristas. La medida se adoptó tras el asesinato, el pasado jueves, del agente secreto español José Antonio Bernal. También ha cambiado de residencia, a una zona defendida por el Ejército de EE UU, el embajador Miguel Benzo, máximo representante español en la Autoridad Civil Provisional de Irak (CPA). Además de los siete funcionarios, dos de ellos diplomáticos, en la Embajada española trabajan 15 iraquíes. La seguridad en el interior del edificio depende de sólo cuatro policías españoles del Grupo Especial de Operaciones, mientras la nueva policía iraquí, que carece de armas, vigila el exterior.

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