El Congreso aprueba la reforma que favorece la relación de abuelos y nietos

La reforma del Código Civil propuesta por el Gobierno para favorecer las relaciones de los abuelos con los nietos en casos de ruptura familiar, fue aprobada ayer por el Congreso de los Diputados con modificaciones que limitan el alcance inicialmente pretendido por el Ejecutivo. El régimen de visitas entre abuelos y nietos será potestativo y no infringirá las resoluciones judiciales que restrinjan la relación de padres e hijos, especialmente en casos de violencia doméstica.

La Comisión de Política Social y Empleo de la Cámara baja dictaminó el proyecto de ley con los votos del PP, CiU, P...

La reforma del Código Civil propuesta por el Gobierno para favorecer las relaciones de los abuelos con los nietos en casos de ruptura familiar, fue aprobada ayer por el Congreso de los Diputados con modificaciones que limitan el alcance inicialmente pretendido por el Ejecutivo. El régimen de visitas entre abuelos y nietos será potestativo y no infringirá las resoluciones judiciales que restrinjan la relación de padres e hijos, especialmente en casos de violencia doméstica.

La Comisión de Política Social y Empleo de la Cámara baja dictaminó el proyecto de ley con los votos del PP, CiU, PNV y Coalición Canaria gracias a la aprobación de una enmienda transaccional entre CiU y el PP, por la que se evita que los padres agresores, aprovechando la estancia de sus hijos con los abuelos, quebranten una orden de alejamiento o que visiten a sus hijos cuando se les haya suspendido el régimen de visitas o retirado la patria potestad.

El nuevo artículo 160 del Código Civil, que posibilita la relación de abuelos y nietos en casos de separación o divorcio de los padres, establecerá, gracias a la enmienda citada, que dicha medida no podrá suponer la infracción de sentencias judiciales relacionadas con casos de violencia doméstica, según explicó a Europa Press la diputada del PP María Jesús Sainz.

Régimen potestativo

La otra modificación realizada por la enmienda consiste en que el régimen de visitas entre abuelos y nietos en convenios reguladores de separación o divorcio será potestativo y no obligatorio para el juez, como inicialmente proponía el Gobierno.

En todo caso, la diputada socialista María José López explicó que su grupo se abstuvo porque el aparente nuevo derecho a las visitas de abuelos y nietos se encuentra ya recogido en el vigente artículo 160 del Código Civil, al prever "las relaciones personales entre el hijo y otros parientes y allegados". López estimó no "imperiosa" la necesidad de esta reforma y la justificó en que "una vez más es una buena operación de marketing".

Más críticos con la reforma han sido varios colectivos de mujeres progresistas. Por su parte, la Asociación Española de Abogados de Familia, que preside el letrado Luis Zarraluqui, elaboró un informe que calificó la iniciativa legislativa de "innecesaria, inadecuada, perturbadora, deficiente y electoralista".

El mencionado colectivo avisó del riesgo de establecer un régimen de visitas de los nietos con los abuelos, teniendo en cuenta que éstos pueden ser cuatro y estar separados entre sí, con el riesgo de "volver locos" a los niños. Igualmente estima que la medida hará "más difícil el convenio y más agrio el pleito", si bien va dirigido a "un núcleo de población cada vez más numeroso y, por tanto, más atractivo desde el punto de vista electoral".