El PP promete rebajas fiscales en los impuestos autonómicos y locales

Las rebajas fiscales constituyen la principal oferta del programa electoral del PP para la cita con las urnas el 25 de mayo. Muchas de ellas ya funcionan en algunas autonomías, y el compromiso de los populares es extender esas rebajas a todas ellas. Por ejemplo, el PP suprimirá "escalonadamente" el Impuesto de Sucesiones para los hijos y los cónyuges, una medida que ya opera, por ejemplo, en Rioja, Cantabria o País Vasco. En el IRPF se comprometen a aplicar deducciones en el tramo autonómico de ese impuesto para la compra de libros de texto; para el cuidado de niños menores de tres años; para ...

Las rebajas fiscales constituyen la principal oferta del programa electoral del PP para la cita con las urnas el 25 de mayo. Muchas de ellas ya funcionan en algunas autonomías, y el compromiso de los populares es extender esas rebajas a todas ellas. Por ejemplo, el PP suprimirá "escalonadamente" el Impuesto de Sucesiones para los hijos y los cónyuges, una medida que ya opera, por ejemplo, en Rioja, Cantabria o País Vasco. En el IRPF se comprometen a aplicar deducciones en el tramo autonómico de ese impuesto para la compra de libros de texto; para el cuidado de niños menores de tres años; para hacer frente a los gastos de un parto múltiple, o cuando la unidad familiar se ocupe del cuidado de una persona dependiente. Además, los ayuntamientos del PP prometen hacer descuentos en el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) a las familias numerosas.

Las rebajas fiscales a las empresas girarán en torno al IAE (Impuesto sobre Actividades Económicas), un tributo que el PP dice haber eliminado. El 8% de las empresas que seguirán pagando ese impuesto tendrán bonificaciones de hasta el 50% de la cuota cuando aumenten su plantilla con contratos indefinidos o inicien su actividad.

La crisis del Prestige ha llevado al PP a anunciar, como promesa de campaña, la creación de una Agencia Nacional de Protección Civil que coordine unas competencias en buena parte transferidas a las comunidades autónomas.

También como política estatal de aplicación autonómica, el PP anuncia la aprobación de una "ley de dependencia" que iguale en toda España la situación jurídica de las personas mayores. A los jóvenes les promete viviendas, con "bolsas de alquiler", y subvenciones a la compra de la primera vivienda destinadas a estos votantes.

Y para hacer cierta su segunda descentralización, es decir, la transferencia de parte de las competencias de las autonomías a los ayuntamientos, se compromete a aprobar, en las autonomías gobernadas por el PP, una ley que traspase efectivamente esas competencias.