Estudiantes extranjeros con la tarjeta caducada deberán abandonar el país

Los universitarios extranjeros pierden los 3 meses de plazo que tenían para regularizar su situación en el caso de que caduquen sus tarjetas de estudiantes, según denuncia la Asociación de Estudiantes Musulmanes de la Universitat de València

Los universitarios que no pertenezcan a la Unión Europea y tengan las tarjetas de estudiantes extranjeros caducadas son declarados ilegales y deberán abandonar el país, aunque esto suponga cortar la carrera inciada en la universidad de destino.

La Asociación de Estudiantes Musulmanes de la Universitat de València ha sido la primera en percata...

Los universitarios extranjeros pierden los 3 meses de plazo que tenían para regularizar su situación en el caso de que caduquen sus tarjetas de estudiantes, según denuncia la Asociación de Estudiantes Musulmanes de la Universitat de València

Los universitarios que no pertenezcan a la Unión Europea y tengan las tarjetas de estudiantes extranjeros caducadas son declarados ilegales y deberán abandonar el país, aunque esto suponga cortar la carrera inciada en la universidad de destino.

La Asociación de Estudiantes Musulmanes de la Universitat de València ha sido la primera en percatarse de "este cambio burocrático en la normativa", subraya en un comunicado de prensa repartido en la Universidad Politécnica de Valencia, donde inciaron el primer acto de protesta, el pasado día 28 de noviembre. Según el comunicado emitido "hasta el año pasado, los estudiantes extranjeros tenían 3 meses, una vez caducada la tarjeta, para renovarla y seguir estudiando en España". Este curso, en cambio, la tarjeta que expira al concluir el curso académico, debía de renovarse antes de que caducara. "Sin previo aviso algunos universitarios han pasado a ser ilegales cuando han vuelto a la universidad tras regresar de sus vacaciones en sus países", advierte Empar Albiach, que hasta el curso pasado era presidenta de la asociación estudiantil. Ahora los estudiantes en situación irregular perderían, según Albiach, la becas automáticamente y deberían de volver a sus países a por el visado y reiniciar el trámite para volver.

El abogado encargado del caso, Francisco Solán, califica de "delirante" la decisión tomada por el Ministerio de Interior por "la interpretación que previamente la Oficina de Extranjería de la Delegación de Gobierno de Valencia hizo del Reglamento de Extranjería y de la Ley de Extranjería". En opinión del letrado de SOS Racismo, la decisión adoptada por ambos organismos se fundamenta en un "falso tecnicismo jurídico" al considerar que las tarjetas universitarias tienen el carácter de estancia y no de residencia. En cualquier caso, argumenta que se basa en "una entelequia porque ni el Reglamento ni la Ley dicen que las estancias se deben renovar antes de caducar".

Desde la Oficina de Extranjería se confirma que el año pasado se permitió a los universitarios renovar sus tarjetas tres meses después de haber caducado, y este año, el primero que se aplica esta medida "no se ha avisado porque no ha habido ningún cambio legal". "Se ha seguido la orden expresa de Madrid. Hemos aplicado la Ley y el Reglamento de Extranjería según lo establecido". Además, justifican que, "si el año pasado no se aplicó es porque el volumen de trabajo de la Oficina de Extranjería en un proceso de regulación por arraigo", de julio de 2001 a abril de 2002, "provocó que los funcionarios fueran más flexibles". Según la Oficina de Extranjería, el número de afectados en toda la Comunidad Valenciana ronda la treintena. La Asociación de Estudiantes Musulmanes indica que afectará a más alumnos. A las 11.00 del próximo día 13 de diciembre la asociación se concentrará frente a la Delegación de Gobierno de Valencia para protestar por "una medida que sólo se está aplicando en Valencia". La Delegación de Gobierno señala, no obstante, que en Madrid también se está aplicando.