Contra la pena de muerte en Idaho

La iniciativa de la Cámara de Representantes de Idaho, en Estados Unidos, de aprobar una declaración en favor de la autodeterminación de Euskadi, ha sido aplaudida por la izquierda abertzale y el propio Gobierno vasco pero no ha agradado a otras fuerzas políticas. El Partido Popular ha puesto en marcha su materia gris y ha comprobado cuál es la situación política, legislativa y social de Idaho, un lugar donde está en vigor la pena de muerte y donde 21 presos esperan hoy en el corredor de la muerte.

Así, el Partido Popular del País Vasco ha solicitado al ...

La iniciativa de la Cámara de Representantes de Idaho, en Estados Unidos, de aprobar una declaración en favor de la autodeterminación de Euskadi, ha sido aplaudida por la izquierda abertzale y el propio Gobierno vasco pero no ha agradado a otras fuerzas políticas. El Partido Popular ha puesto en marcha su materia gris y ha comprobado cuál es la situación política, legislativa y social de Idaho, un lugar donde está en vigor la pena de muerte y donde 21 presos esperan hoy en el corredor de la muerte.

Así, el Partido Popular del País Vasco ha solicitado al lehendakari, Juan José Ibarretxe, que su Gobierno reclame a Idaho, y en concreto a su secretario de Estado, Pete Cenarrusa, que 'supriman de su legislación la pena de muerte, así como que impulsen desde su Cámara legislativa el respeto absoluto de los derechos humanos'.

El secretario general del PP, Carmelo Barrio, ha presentado en el Parlamento vasco una proposición no de ley para trasladar desde el Legislativo y el Ejecutivo vasco esta propuesta de abolición de la pena de muerte.

Ibarretxe agradeció el pasado jueves a las autoridades de Idaho su declaración aprobada la pasada semana por las Cámaras legislativas de ese Estado, en la que primero sólo se apoyaba la autodeterminación de Euskadi y a la que posteriormente se sumó una moción en contra de la violencia de ETA, a instancias del Gobierno de Estados Unidos.

El lehendakari apuntó que la Cámara de Idaho había aprobado el reconocimiento del derecho de autodeterminación, 'en los mismos términos en los que fue aprobado por el Parlamento vasco'.

La iniciativa parlamentaria del PP subraya en su escrito que 'la edad mínima para que una persona pueda ser ejecutada es de 16 años', y plantea que Parlamento y Gobierno vasco se dirijan al legislativo de Idaho solicitando la supresión de la pena de muerte.