La Comunidad reclama a la Unión Europea 6 millones de euros para cuatro zonas rurales desfavorecidas

La Comunidad de Madrid considera que en la región existen cuatro zonas rurales especialmente desfavorecidas: el área de Lozoya-Somosierra, integrada por 54 pueblos; la suroccidental, que agrupa 20 localidades, entre las que se cuenta San Martín de Valdeiglesias; Las Vegas, que reúne 22, entre ellas San Martín de la Vega; y La Campiña, que engloba 15, incluida los Santos de la Humosa. En un informe remitido a la Unión Europea por la Dirección General de Agricultura, dependiente de la Consejería de Economía, se especifica que 'necesitan ayuda de iniciativas comunitarias específicas para resolver...

La Comunidad de Madrid considera que en la región existen cuatro zonas rurales especialmente desfavorecidas: el área de Lozoya-Somosierra, integrada por 54 pueblos; la suroccidental, que agrupa 20 localidades, entre las que se cuenta San Martín de Valdeiglesias; Las Vegas, que reúne 22, entre ellas San Martín de la Vega; y La Campiña, que engloba 15, incluida los Santos de la Humosa. En un informe remitido a la Unión Europea por la Dirección General de Agricultura, dependiente de la Consejería de Economía, se especifica que 'necesitan ayuda de iniciativas comunitarias específicas para resolver los problemas a que se enfrentan (aislamiento, despoblamiento, emigración, paro, envejecimiento, bajas rentas o presión sobre el medio natural)'. Tras la petición, estos pueblos se beneficiarán del denominado tercer Plan de Iniciativa comunitaria Leader.

Por medio de este plan, la Unión Europea aportará seis millones de euros (1.000 millones de pesetas) en siete años, y otro tanto las administraciones locales y autonómicas. Las iniciativas que se aprueben -por lo general tendentes a fomentar el empleo, crear nuevas industrias o favorecer el turismo rural- gozarán, gracias a estos fondos, de una subvención del 50%. El otro 50% deberá salir de las arcas de los privados que lleven a cabo estas iniciativas.

Entre los objetivos del plan se cuentan, entre otros, los siguientes: diversificar la economía rural, potenciar los productos locales, utilizar las nuevas tecnologías y generar pequeñas industrias agroalimentarias basadas en recursos de las propias áreas afectadas. La diputada socialista María Luisa Álvarez Durante aseguró que el plan 'es positivo', pero denunció la falta de información de los diputados de la oposición 'a la hora de conocer y opinar sobre los informes que se mandan a Europa'.

La diputada socialista también criticó el retraso con el que se acometen estos planes: 'Este plan debía haber empezado en 2000 y terminar en 2007. Pero los pueblos todavía no han recibido ni el dinero ni las autorizaciones para solicitar las subvenciones a los proyectos concretos', dijo.